Logo Al Dialogo
antonio sanchez gonzalez

La salud en las redes sociales

La salud en las redes sociales

Antonio Sánchez González.

TikTok es una plataforma socorrida principalmente por adolescentes o adultos jóvenes, que no necesariamente están acompañados por especialistas o psicólogos ante sus dolencias.

Antonio Sánchez
|
1 de agosto 2025

Hace dos meses, el sábado 31 de mayo, el diario inglés The Guardian publicó los resultados de una investigación periodística sobre videos de TikTok dedicados a consejos de salud mental. Los periodistas del diario británico se han asociado con un equipo de médicos y psicólogos para diseccionar los cien videos más populares publicados en inglés con la palabra clave #mentalhealthtips (“consejos de salud mental”).

Según el artículo, más de la mitad (52) de los videos de TikTok analizados por ellos pueden causar problemas. The Guardian menciona algunos casos de desinformación, pero sobre todo videos “vagos” o “inútiles”, que pueden ser confusos y, en la mayoría de los casos, insuficientes para ayudar a los espectadores que buscan lidiar eficazmente con trastornos reales.

TikTok es una plataforma socorrida principalmente por adolescentes o adultos jóvenes, que no necesariamente están acompañados por especialistas o psicólogos ante sus dolencias.

Como pate de su publicación, The Guardian entrevistó a una psicóloga calificada que tomó como ejemplo el trastorno de estrés postraumático (TEPT), del cual se dijo que ella es especialista. “Cada video sugiere que todos (…) sufren síntomas similares, que se explican fácilmente en treinta segundos. En realidad, el TEPT (…) requieren la intervención de un profesional médico capacitado y acreditado, para ayudar a una persona a comprender su propio patrón individual”.

TikTok desinforma al sugerir que existen trucos secretos universales. [y] puede, de hecho, hacer que el espectador se sienta aún peor: puede sentirse como un fracaso cuando los trucos en cuestión no lo curan”, teme la misma especialista.

En la misma serie de artículos, The Guardian resalta algunos patrones repetidos en los cien videos analizados por su equipo: el uso de términos médicos sin ningún conocimiento real sobre el tema, el peso desproporcionado de las anécdotas personales y los testimonios en primera, cada emoción sentida (como la ansiedad) es evidencia de un trastorno específico cuando se puede sentir en muchas situaciones clínicas diferentes y la difusión de tratamientos o remedios cuya eficacia no ha sido probada, o no está necesariamente adaptada a todas las situaciones (llorar, escribir en un diario, técnicas de respiración, etc).

Como respuesta a The Guardian, TikTok criticó las “limitaciones” de la “metodología” del “estudio” del diario británico. Según los equipos de la red social, incluso se opondría a la “libertad de expresión” al sugerir que a los usuarios de TikTok “no se les debería permitir compartir sus historias individuales”.

La diferencia de opinión que está en el centro del problema señalado por The Guardian muestra que TikTok parece minimizar el aspecto médico que pueden tener los videos publicados en su plataforma, cuando se presentan como “consejos” para manejar mejor las dolencias que uno padece o para aprehender trastornos cuyo origen puede ser neurológico y tener consecuencias graves, y mostró que casi el 90% de los videos sobre el tema fueron publicados por personas que no trabajan en el campo de la salud.

Esta falta de comentarios profesionales da paso a videos con monólogos basados en el intercambio de experiencias e impresiones individuales, pero no validados científicamente. Por lo tanto, es crucial recordar que solo el seguimiento profesional puede garantizar el apoyo adecuado, y plataformas como TikTok deberían fomentar esta clara distinción entre el intercambio personal y la experiencia profesional.

reproductor
Tik tak zac S.A. de C.V.- De no existir previa autorización por escrito, queda expresamente prohibida la publicación, retransmisión, edición y cualquier otro uso de los contenidos de este portal.