El tiempo, nuestro peor enemigo

Según la RAE la definición de tiempo da varios resultados; 1.- Duración de las cosas sujetas a mudanza; 2.- Magnitud física que permite ordenar la secuencia de sucesos estableciendo un pasado, presente o futuro donde cuya unidad internacional es el segundo; y 3.- parte de la secuencia de los sucesos.

Sin duda para nosotros, esta unidad de medida es la única que decide o deja dicho lo bien que estamos actuando en esta vida terrenal.

Llevamos casi un mes con un ataque frontal de la prensa nacional ante los sucesos de inseguridad que se han dado en nuestro estado, pero lo peor es que en este lapso recorrido, la percepción de inseguridad ha logrado llegar a límites inimaginables.

Un problema de nuestro estado que urge corregir es que la percepción es ya una cruda realidad.

Dado que la industria turística zacatecana está viviendo una crisis, algunos hoteleros del estado invitamos en estos pasados días a los secretarios de Turismo y Economía a un desayuno para dialogar con ellos y encontrar en conjunto la fórmula para reactivar la oferta turística estatal. Sin duda con el secretario Barragán se lograron acuerdos importantes, llamándome la atención el interés mostrado en lo expuesto, así como la preocupación conjunta por los sucesos de violencia mencionados previamente.

Cabe mencionar que a pesar de ser un problema de todos, las cabezas de nuestro gobierno siguen ignorando los llamados de la gente para la cual trabajan. Le comento que dicho desayuno se agendó para el día que el secretario de economía Rodrigo Castañeda tenía espacio, mismo que nos lo agradeció con un plantón. Es de dar vergüenza el poco interés de los que “llevan” el motor económico del estado, ojalá a mi estimado amigo el día de mañana no se le caiga el teatro y tenga que afrontar el cierre de hoteles en la capital; sin duda debut y despedida con nosotros.

Otro de los lugares donde el tiempo está cobrando una muy cara factura es en una de las obras magnas de esta administración federal, el Tren Maya. Desafortunadamente para ellos los que criticamos esta obra, los que especulan con terrenos, los ejidatarios y ambientalistas ya no son su problema actual, el principal problema con el que se lidia aquí es el tiempo que corre como si fuera a ser este transporte de alta velocidad.

Sin duda el presidente es uno de los principales culpables del retraso de la obra ya que cambió la idea original donde en vez de ser una asociación público privada, lo hizo solo pública. Los cambios de ruta, caprichos y relevos de cabezas del proyecto, así como los obstáculos no imprevistos están cobrando una factura impagable. Si las cosas siguen como hasta ahora, a finales del sexenio estarán difícilmente construidas dos de las terceras partes del proyecto y tristemente sin contar pesos, será otra de las muchas mentiras presidenciales.

Otra de las obras victimizada por Cronos es el Aeropuerto de Santa Lucía el cual corre un riesgo alto de convertirse en un elefante blanco. Si bien estamos a casi un mes de su inauguración, no se ve clara una estrategia para que líneas nacionales o internacionales hagan de este su casa. En lo particular me llamó la atención el anuncio de Aeroméxico en el cual aseguró volarían dos rutas saliendo de ese aeródromo. No se necesita ser un experto para entender que el modelo comercial de dicha aerolínea está basado en su interconexión.

Es claro que un pasajero que llegue a Santa Lucía o al AICM estará sin opción a conectar inmediatamente, teniendo que pernoctar o gastar una fortuna y medio día para ir de un aeropuerto a otro.
Por su parte Viva Aerobús y Volaris si saldrán de allá, tomando como rutas las capitales más importantes de nuestro país, donde al momento de hacer cuentas estas como siempre no me cuadran. Si son 6 rutas más o menos y a cada una se le agregan 100 pasajeros, en un año se moverían por allí aproximadamente 217 mil pasajeros, número muy bajo de lo previsto por ellos ya que anunciaron se desplazaría a 2 millones de personas.

Santa Lucía se podría defender con vuelos de carga o con otras aerolíneas internacionales pero esto suena muy complicado debido a la casi nula conectividad terrestre con la que cuenta. La construcción del famoso tren o de carreteras que lleven a la gente allá no es solo cosa de presupuesto, existe en esta variable el factor más cruel a considerar en nuestra vida, el famoso tiempo, quien amenaza a esta obra en ser totalmente absurda.

Le dejo de tarea el evaluar pagar un bajo TUA (tarifa de uso de aeropuerto) por viaje saliendo de este aeropuerto, pero deberá agregar el tiempo que le tendrá que invertir a su traslado así como el costo del mismo. Para las personas que necesitamos viajar y conectar, simplemente llegar a Santa Lucía no es opción.

Así se nos va la vida, así se le ha ido el tiempo al presidente sin lograr nada importante, así hemos visto pasar tres años en los cuales en vez de sumar restamos. Ojalá y personas como el secretario de economía de mi estado comprendan que el tiempo corre, que no los podemos esperar y que el actuar no se da cuando quieren, simplemente se da cuando se solicita. Hasta la próxima.