Del Festival Cultural y algo más
En estos 38 años del Festival Cultural en Zacatecas, han desfilado por el escenario de plaza de armas cantantes de talla internacional.
Este sábado comienza la trigésimo octava edición del Festival Cultural de Zacatecas donde ahora y como todo lo de este año, lleva la frase de “por la paz”. Será un festival modesto y como siempre, nuestra Plaza de Armas lucirá como escenario principal de los eventos que coronen el día a día de nuestras vacaciones.
Y como era de esperarse, las críticas al programa sonaron fuerte desde hace algunos días, detalle que por respeto a las personas que se presentan omitiré hacer comentarios al respecto en este espacio, incluso la prensa estatal me cuestionaba hace unos días si nos afectaba en la ocupación la falta de aristas de renombre en el cartel.
La realidad es que no y posteriormente le explicaré el por qué, pero para que usted pueda tener una visión más amplia de la importancia del festival en cuanto a números hoteleros bien vale la pena darle una vuelta a la historia del mismo.
Platiqué en la semana con un grupo de amigos con los cuales estamos iniciando el Consejo Estatal Turístico de Zacatecas, salió a relucir la historia del festival cultural y recordamos a quienes lo iniciaron hace algunos ayeres; Álvaro Ortiz Pesqueira, Victor Hugo Rodríguez Becquer, Alma Rita Díaz y Titta Míchel visualizaron este concepto mismo que fue planeado con el único objetivo del gusto y disfrute de los zacatecanos que por diversas razones no salían de vacaciones.
La evolución no podía excluir a nuestro festival y fue en su tiempo que el Gobernador Genaro Borrego le dio un giro ya no tan local y enfocado a poder recibir más turismo, tratando de hacer algo similar a otros festivales culturales existentes en el territorio nacional.
En estos 38 años de la presencia de la cultura en Zacatecas, han desfilado por el escenario de plaza de armas cantantes de talla internacional tales como Fernando de la Mora, Placido Domingo, Raúl Di Blasio o los niños cantores de Viena. Figuras de la música como Bob Dylan, Michael Bolton o grupos como Air Supply y The Alan Parsons Proyect entre muchos otros, pero la realidad es que por la premura de la presentación que siempre se ha dado, la poca promoción con la que cuenta a nivel nacional este evento junto con el estado y el desconocimiento de operadores turísticos que pueden vender Zacatecas como destino vacacional; esta pléyade de estrellas brilló en su momento para el público local así como para un grupo de turistas que habían planeado sus vacaciones en nuestra bizarra capital y se toparon por azar con un festival gratuito de dimensiones inimaginables.
Bajo ese patrón han transcurrido 38 años en los que este evento se nos quiere vender como la panacea turística, en este tiempo se quiere ver un festival cultural que a veces ni los zacatecanos conocemos, un festival metido con calzador en una de las mejores épocas vacacionales del año donde no se necesita nada más, un festival que tristemente no influye para que la gente venga a Zacatecas, un festival que como cada año pasa sin pena ni gloria.
Siendo muy crítico, le comento que como presidente la de Asociación de Hoteles he sugerido por años se mueva de fecha para que motive a la ocupación hotelera en épocas más complicadas, que a la clausura del mismo se presente el cartel y fechas del festival del año entrante, y que se le pierda el miedo a gastar dinero en promoción del mismo no 3 semanas antes, sino al menos 6 meses antes de la fecha de inicio.
Al hablar de lo económico entramos al juego de si fue primero el huevo o la gallina, ya no se le invierte al festival como antes porque no atrae turistas, porque los que llegan vienen a disfrutar de otras cosas y lo peor, no hay poder humano que garantice un lugar prioritario a nuestros visitantes en plaza de armas porque los locales se enfurecen, así nuestra cultura turística actual.
Si se planeara el festival con tiempo, si se presentara el cartel publicitario del siguiente al final del evento y si se promoviera como se debe, le aseguro no necesitaríamos de un programa como los de antes ya que con un programa modesto pero a tiempo, le da la oportunidad a la gente que generalmente planea su destino vacacional con un mínimo de tres meses de anticipación a poder pensar en el festival cultural; le aseguro que de ser así, se podrían tener uno o dos eventos estelares cobrados que elevarían la calidad de turismo que recibimos.
Que quede bien claro que no me estoy quejando ni del programa, ni del festival, mucho menos de nuestros funcionarios; me quejo de la poca apuesta a la promoción turística de Zacatecas, me quejo de esa inercia que aunque cambien los gobiernos y el color de los mismos parece más sólida que el concreto, me quejo de la nula visión que se tiene en la conversión de algo bueno a algo formidable, me quejo de que jamás han escuchado a quien nos duele que no vengan visitantes.
Finalmente desearle a la comunidad turistera de Zacatecas que a pesar de todo tengamos un festival próspero y en paz, que regresen nuestros visitantes y por supuesto que los atendamos como se merecen. Hablemos bien de Zacatecas.
Disfrute sus vacaciones, si no sale consuma local, visite nuestros atractivos y enfoque a su familia a que conozca nuestra historia.
Hasta la próxima.