Jugar al empate

No sé quien escribió esta analogía que un amigo me envió y quiero compartir. A los que han jugado futbol o son futboleros profesionales como varios amigos que tengo, quizá hasta la corrijan y aumenten, pero es todo un genio el que la hizo y analiza un resumen casi perfecto, sería ideal para el escritor y periodista mexicano Juan Villoro.

“En términos futboleros, México se enfrenta a uno de los rivales más difíciles de los últimos años. Un trabuco que invencible, derrotó a China y Japón, goleó a España y Estados Unidos y destrozó a Italia: el Covid19.

México no ha invertido en infraestructura ni talento. Lleva muchos años con malos entrenadores, escándalos de cachirules, corrupción, partidos amañados y mucha violencia. No conoce el “fair play”.

El actual director técnico es conocido por tenaz, canchero y marrullero, le falta roce internacional. Quiere seguir jugando como se jugaba en los 70, no entiende que ese estilo está superado, el futbol ya cambió. AMLO acostumbra “morirse con la suya”, le faltan variantes e imaginación. Cree que con su nombre gana los partidos, que basta con “madrugar”. Juega para el público y se confía que la tribuna lo respalda. Pero la porra se cansa.

Este duelo es decisivo para la permanencia del equipo en primera… y va muy mal.

Para el juego vs Covid-19, debutó a Gatell colocándolo en una posición que no es la suya. El canterano es muy técnico y se ha echado a México al hombro. Otro joven técnico es Zoé Robledo, que se ha crecido ante rivales difíciles. A Marcelo, su 10 natural, lo pone a jugar en todos lados, le da demasiadas tareas porque es eficaz, pero le falta dirección. Irma Sandoval es limitada y juega muy sucio, Herrera se nota desesperado y Poncho Romo de plano no entiende la mística del entrenador. Está roto el vestidor.

¿Lo peor? Que, minimizando al rival, se da el lujo de jugar sin tres posiciones clave: sale sin secretaria de gobernación, sin secretario de Salud y sin secretaria de Economía. ¿Así cómo pretende no ser goleado? Así que prendan las veladoras y saquen los escapularios, que el juego de los ratones verdes ya comenzó…”

Quedémonos en casa para seguir disfrutando la vida, porque este juego va para largo, llegará a la final, el cual tendrá tiempos extra y se decidirá en penaltis.

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