Con . . . Ciencia. Nomofobia

El dispositivo electrónico que en la historia de la humanidad ha alcanzado el mayor nivel de uso es el celular. En la actualidad los seres humanos tenemos tanta información guardada en este dispositivo y lo utilizamos para tantas tareas que perderlo se convierte en una tragedia.

 

Todos hemos experimentado la sensación de angustia y desesperación cuando no localizamos nuestro celular en el lugar que creemos haberlo dejado; incluso solicitamos ayuda para que alguien intente comunicarse a nuestro número (que, por la ansiedad nuestra mente nos traiciona y no lo recordamos con precisión) para que con el sonido de llamada sea más fácil ubicarlo.

 

Este comportamiento es normal debido al uso excesivo que le damos a nuestro celular. El problema ocurre si sudan las manos cuando no se tiene señal de internet, si se presenta ansiedad excesiva al danos cuenta de que se olvidó el celular en casa o si se acelera el corazón cuando se observa que la marca de la batería se encuentra al límite de terminar; entonces se puede tener un problema grave de adicción y dependencia.

 

Esta adicción se llama nomofobia y se identifica como el miedo irracional a no tener celular o a estar incomunicado a internet, este síntoma se ha incrementado en los últimos años a consecuencia de la mayor facilidad para adquirir un smartphone y al gran auge de las redes sociales.

 

De esta manera, el miedo irracional para permanecer un intervalo de tiempo sin celular se llama nomofobia, este término es un acrónimo de la expresión inglesa “no–mobile-phone-phobia”.

 

En 2011 en Reino Unido se llevó a cabo la investigación que permitió acuñar este término, la oficina de correos británica Royal Mail encontró que el 53% de los usuarios de celular, tienden a experimentar ansiedad cuando pierden su teléfono celular. Además, el resultado de este estudio demostró que los niveles de estrés de una persona con nomofobia se equiparan con el estado de nerviosismo que se tiene un día antes de la boda o de una cita con el dentista.

 

Las personas que manifiestan este trastorno generan niveles de estrés alarmantes cuando no tienen el celular en sus manos o el dispositivo se queda sin señal, algunos síntomas de la nomofobia pudieran ser:

 

• Considerar que el celular es la posesión más valiosa.

 

• Dedicar un porcentaje importante del ingreso a la adquisición de un celular de última generación.

 

• Gastar mucho dinero en un plan de telefonía celular que garantice conexión a internet en todo momento.

 

• Desarrollar un miedo irracional al no tener el celular en sus manos.

 

• Estar constantemente atento al celular para verificar la recepción de mensajes.

 

• Disminuir las horas de sueño o comida para estar atento a redes sociales en el celular.

 

• Nunca apagar el celular, esté donde se esté y sin portar lo que se haga.

 

• Presentar malestares como dolor de cabeza o de estómago si se añeja del celular.