Alianza electoral internacional

Jaime Santoyo Castro.
Jaime Santoyo Castro.

Es evidente que el Presidente López Obrador va a Estados Unidos a apoyar a Trump en su campaña para reelegirse. Nadie hubiera esperado que un candidato a Presidente del país más poderoso del mundo requiriera de los servicios de un Presidente Mexicano para ganar votos; pero menos aún que un Presidente que dice ser de … Leer más

Es evidente que el Presidente López Obrador va a Estados Unidos a apoyar a Trump en su campaña para reelegirse.

Nadie hubiera esperado que un candidato a Presidente del país más poderoso del mundo requiriera de los servicios de un Presidente Mexicano para ganar votos; pero menos aún que un Presidente que dice ser de izquierda prestara tales servicios a la ultraderecha que dice repudiar. ¡Vaya contradicción!

Hace seis años, el Presidente Peña Nieto, fue calificado como traidor, indigno y entreguista por los que se decían de izquierda cuando invitó al aspirante presidencial Trump a visitar nuestro país. En esa ocasión, Trump le apostó a que una visita a México le daría votos de los mexicanos residentes en ese país, y así fue. Por supuesto que no le apostó a la entonces decaída popularidad de Peña Nieto, sino a la ingenuidad de los mexicanos, que siempre esperamos a algún salvador blanco y barbado.

Ahora le apuesta a la popularidad de AMLO, porque hay que reconocer que a Andrés Manuel lo quieren más los mexicanos de allá que los de acá y al orgullo de López Obrador, que afirma que va a agradecerle los apoyos que México ha recibido durante la pandemia y por que ha respetado la soberanía de nuestra país.

Con estas expresiones deja ver que está postrado; exhibe su debilidad ante el mundo; y nos presenta a los mexicanos en una actitud servil que nos lastima y por supuesto, nos averguenza.

Trump presume un hipócrita y manipulador aprecio por AMLO, pero no por los mexicanos. Lo reconoce como aliado y le agradece los servicios que le ha prestado en todo lo que ha pedido, como detener las caravanas de migrantes, aprecio que nos está costando muy caro a los mexicanos de acá.

AMLO no es ingenuo; sabe a lo que le está apostando, y tiene muy claro que se trata de facto de una alianza electoral entre él y su “amigo” Trump, que si se reelige, le va a pagar el favor con todo su poder en las elecciones de 2021. Pero…¿y si no gana?




Más noticias


Contenido Patrocinado