
José Luis Medina Lizalde.
La clase política gobernante a la que le ha tocado lidiar con el problema no se distingue por humilde cuando usa el tema para descalificar a su enemigo político local.
¿Es verdad que Zacatecas es un ejemplo de buenos resultados en materia de seguridad como lo asegura la presidenta de la república y lo proclama el gobernador Monreal?
En torno al tema se han construido dos narrativas opuestas, la triunfalista que proclama logros por encima de los obtenidos por gobiernos anteriores y la de la oposición que considera que reconocer un logro es hacerle el caldo gordo a sus adversarios que gobiernan.
La versión apegada a los hechos no es absoluta.
Cierto es que el seguimiento más confiable demuestra el crecimiento sin precedente del número de aprensiones que se refleja en una ocupación carcelaria más alta que nunca y que la disminución de delitos de alto impacto es una realidad, pero el estado no ha consolidado las capacidades locales que afiancen el potencial de respuesta a la acción delictiva con atención a las causas.
La clase política gobernante a la que le ha tocado lidiar con el problema no se distingue por humilde cuando usa el tema para descalificar a su enemigo político local cuando en ese renglón comparten más defectos que virtudes y todos padecieron en su momento el escarnio nacional por sucesos que los mostraron impotentes y rebasados, para mencionar uno solo correspondiente a cada período enlistamos la fuga del penal de Cieneguillas de 53 reos cuando Amalia García, la operación protegida policialmente de privación ilegal de la libertad de presidente y tesorero de la Unión Ganadera Regional en pleno centro y en pleno día cuando Miguel Alonso, de la carnicería que significó la muerte violenta de 17 reos en Cieneguillas el primer día del 2017 cuando Alejandro Tello y el depósito de 10 cadáveres frente a palacio de gobierno el 6 de enero de 2022 ya con David Monreal al frente.
Los cambios más importantes en la política nacional de seguridad pública que impactan en nuestra realidad local son: Reformas legalizando la participación de las fuerzas armadas en tareas de seguridad (Hasta antes de 2019 actuaron al margen de la legalidad), Formación de recursos humanos para sustituir al AFI, Federal Preventiva, CISEN y reabsorción en SEDENA del Estado Mayor Presidencial, Servicio policial territorial con cobertura sin precedente (Guardia Nacional con sus correspondientes cuarteles) Universidad Policial, Licenciatura en seguridad pública adscrita al H. Colegio Militar y renovado marco jurídico para labores de inteligencias e investigación del delito disponibles para las fiscalías.
Tengo la convicción que el video de David Monreal dirigiéndose al pueblo aquella mañana del 6 de enero de 2022 encendió las alarmas en el gobierno federal al ver a un gobernante estupefacto, intimidado, invocando el ruego a Dios como escudo protector ante los criminales.
Respondieron con más fuerzas federales en el territorio ante una criminalidad tan desafiante que se atrevió a tender una trampa (aún inexplicada) a un general del ejército que al momento de morir fungía como comandante de la Guardia Nacional en el estado.
A lo anterior se agrega la más cuantiosa inversión en tecnología de vanguardia que la reciente inauguración del C-5 pone de manifiesto y los cuarteles de la GN en el territorio que dejan atrás los momentos en los que los elementos federales ocupaban céntrico hotel en Zacatecas y el Gimnasio municipal en Fresnillo.
El gobierno del estado, sigue confiando la protección de los zacatecanos a equipos foráneos en los órganos estatales como consecuencia de la omisión en la formación de elementos locales, es así como los mandos e integrantes de la Fuerza de reacción inmediata (FRIZ), la Fiscalía general del estado y las autoridades penitenciarias son procedentes de otros estados.
Las cámaras de video-vigilancia siguen sin acreditar para que han servido y los cuerpos policiacos municipales siguen en la precariedad.
Se percibe mejor coordinación con el gobierno federal y una atención continua a la dinámica delictiva, pero creo al no impulsar la construcción de las capacidades locales incurre en la misma omisión de sus antecesores, con los que comparte también la misma actitud “pasalona” de no imponer correctivos ante hechos como el asesinato de un joven en el municipio de Tabasco, la artera agresión a las mujeres el 8 de marzo y la absurda confiscación de obras de tejido de las madres buscadoras en el marco de su cuarto informe.
Es infantilismo político no reconocer progresos en seguridad porque piensan que eso le hace el caldo gordo a David Monreal y es igualmente irresponsable no reconocer la persistencia de redes de corrupción que traban la eficacia en el combate a la inseguridad ¿Imagina el lector lo terrible que sería que el C-5 no esté en buenas manos?
Coexisten progresos y rezagos con David Monreal, hay que distinguir unos de otros para entender nuestra realidad.
Nos encontramos el lunes en Recreo