Valoremos lo que tenemos y que tiene solución

Gerardo Luna Tumoine.
Gerardo Luna Tumoine.

El ser humano por naturaleza vive en constante búsqueda, su interior es insaciable, nunca está conforme con lo que tiene, con lo que es, siempre está añorando aquello que no tiene. Se la pasa quejándose, llorando, lamentándose y más aun investigando y creando salidas y soluciones a diversas situaciones que muchas veces están fuera de … Leer más

El ser humano por naturaleza vive en constante búsqueda, su interior es insaciable, nunca está conforme con lo que tiene, con lo que es, siempre está añorando aquello que no tiene. Se la pasa quejándose, llorando, lamentándose y más aun investigando y creando salidas y soluciones a diversas situaciones que muchas veces están fuera de su alcance o simplemente no las tienen.

Es más fácil pensar en lo que no tiene o le hace falta, centra la atención en los vacíos y carencias, convirtiéndolos en indispensables para sentirse realizado, dejando todo lo demás que posee a un lado. Muchas veces en esa búsqueda angustiosa, deja ir lo valioso que ya tenía, porque se le va la vida buscando quizás una solución donde no la hay, o no depende de él, queriendo encontrar algo que tal vez no está, esperando lo que posiblemente nunca vendrá.

Y se echa a morir estando vivo, se le van los mejores años y se pierde mil cosas por no valorar y cuidar lo precioso que posee.

Es bueno tener sueños y luchar por ellos; pero no podemos desgastarnos y olvidarnos de lo que poseemos, hay que aprender a ser feliz con lo grande y lo pequeño. Si las cosas tienen solución, no hay porque angustiarse y perder la paz. Trabajemos con ahínco por poder arreglar, pero si aquello no tiene otra salida o no se puede solucionar, tampoco hemos de echar todo por la borda y renunciar a nuestra felicidad.

Hay todavía mucho por hacer y por soñar construyamos nuevas ilusiones, busquemos nuestra realización personal, basada en realidades analizando nuestras habilidades y debilidades. Hay que aprender a aceptar que tenemos limitaciones y no convertirlas en bloqueos mentales y frustraciones. Hay muchas cosas que quizás añoramos y no podemos tener, un amor prohibido, un hijo que no ha nacido, algo de dinero o posición, algún objeto, un trabajo, no pensemos que se nos ha negado, simplemente hay que entender y aceptar que así suele suceder aunque no lo comprendamos y al saberlo nos hagamos daño.

La dirección de nuestras vidas debe ser positiva, no nacimos para causar problemas o hacer daño a otros. Para que nuestra vida sea valiosa, creo que debemos desarrollar buenas cualidades humanas: calidez, bondad, compasión, y entonces nuestra vida se volverá significativa y más pacífica, más feliz.




Más noticias


Contenido Patrocinado