Perfectos y Punto Final
En el siglo pasado ya fuera en la “dictadura perfecta” o en la incipiente democracia cuando alguien se convertía en candidato, ya fuera del partido en el poder oposición, de inmediato se volvía un ente puro, mesiánico, que no cometía errores y si los cometía no era necesario siquiera reconocerlos para eso estaban los hombres y … Leer más
En el siglo pasado ya fuera en la “dictadura perfecta” o en la incipiente democracia cuando alguien se convertía en candidato, ya fuera del partido en el poder oposición, de inmediato se volvía un ente puro, mesiánico, que no cometía errores y si los cometía no era necesario siquiera reconocerlos para eso estaban los hombres y mujeres de partido o la cargada.
Al tiempo el desprestigio y el hartazgo hicieron que cualquiera que tuviera una candidatura se convirtiera en lo peor, capaz de cualquier inmundicia para acceder o seguir en el poder.
Esto último ha prevalecido aunque con matices conforme se ha consolidado nuestro sistema democrático, pero aún hoy en medio de las elecciones y pese a los esfuerzos de todos los partidos por posicionar a sus hombres y mujeres, hay muchas personas que están desencantadas de la política y prefiere abstenerse de votar o participar argumentando que, todos los candidatos son malos o bien que sí alguno tiene alguna virtud no les convence porque tiene uno o mil defectos.
Lo que debemos entender es que en ninguna parte del mundo existen partidos o candidatos perfectos los partidos nunca han sido ni serán perfectos porque son institutos creados por hombres imperfectos capaces de grandeza pero también de mezquindad y qué decir de los candidatos pueden tener muchos defectos pero también van a tener virtudes porque son seres humanos hombres y mujeres como nosotros.
De nuestro entorno y formados bajo nuestra realidad, ni en esta lección ni en las que vienen vamos a tener candidaturas que se acerquen a la perfección.
Nuestra elección tiene que hacerse con lo que hay porque es lo que tenemos anular nuestro voto abstenernos o quejarnos de la política por los defectos de sus participantes solamente da la oportunidad de que aquellos que reconociendo defectos, virtudes o fanatizados votan elijan por los que se abstienen.
No renuncian a una elección a elegir, se la endosan a los que si participan otorgándoles más poder al dejar en sus manos y con su voto la decisión que nosotros no ejercimos.
Punto Final
Feliz cumpleaños Erika, amor de mis amores, sangre de mi alma, alegría de mi corazón y motor y de mi vida.
Que sean muchos, muchos más, plena, llena de salud y bienestar. TAT