Las crisis sanitario-económica y de seguridad aún no afectan a Morena

El domingo 6 de junio del año entrante, los mexicanos elegiremos a 300 diputados de mayoría. Con base en los resultados de esa votación serán designados otros 200 diputados de representación proporcional. Los 500, junto a los senadores que fueron electos el 1 de julio de 2018, integrarán la 65 Legislatura del Congreso de la Unión a partir del 1 de septiembre de 2021.

Ese mismo domingo también elegirán a su gobernador los ciudadanos radicados en 15 estados.

Hoy, ocho de esos 15 son gobernados por priistas: Campeche, Colima, Guerrero, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala y Zacatecas; y cuatro por panistas: Baja California Sur, Chihuahua, Nayarit y Querétaro. En lo que a los tres restantes se refiere, Michoacán es gobernado por un perredista, Baja California por un morenista y Nuevo León por un independiente.

El 6 de junio, en 29 estados también serán electos 1063 diputados locales y 1926 ayuntamientos, alcaldías y juntas municipales.

Los dirigentes y militantes más distinguidos de los partidos de oposición –PAN, PRI, PRD y MC– parecen creer, a juzgar por sus palabras, que la grave crisis sanitaria, económica y de seguridad en que el país está inmerso ha contribuido a generar un creciente rechazo al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y el partido que fundó y que hoy tiene cómodas mayorías en el congreso federal y varias legislaturas locales.

Estos opositores parecen ignorar que casi todas las encuestas señalan que la gestión de AMLO es bien evaluada por entre el 55 y el 60% de la población, dependiendo de la encuesta que se vea, y tratan de convencernos de que los resultados de las elecciones realizadas el pasado 18 de octubre en Coahuila e Hidalgo, que favorecieron al PRI, son pruebas irrefutables que demuestran la creciente impopularidad del presidente y MORENA.

No es mi propósito aquí explicar por qué 36 candidatos priistas ganaron las 16 diputaciones de mayoría en Coahuila ni 31 presidencias municipales en Hidalgo (entre ellas las más importantes, incluyendo la capital, Pachuca).

Lo que aquí mostraré son los resultados de la encuesta realizada por AZ2 a principios de este mes para conocer cuáles son los partidos políticos que llevan la delantera en los 15 estados en donde se elegirá gobernador y los 300 distritos electorales que elegirán un diputado federal.

Al preguntarle a las 12 mil personas por cuál partido votarán en las elecciones legislativas federales, 35% dijo que por Morena, 29.5% por el PAN, 17.7% por el PRI, 9.9% por otros y 7.8% expresó no estar decidido aún.

En lo que a los gobernadores se refiere, MORENA lleva la delantera en 13 de los 15 estados y solo en tres –Baja California Sur, Chihuahua y Querétaro– aventaja el PAN (en Chihuahua por un margen mínimo).

Es evidente que, hasta ahora, las crisis sanitario-económica y de seguridad aún no afectan a Morena.

Pronto se sabrán los nombres de quienes cada partido postulará y se conocerán las coaliciones partidistas que presentarán un candidato común en algunas gubernaturas y otros cargos. Esto, junto con el agravamiento de las crisis, naturalmente harán variar los resultados de la encuesta que presentó ayer Juan Azcárraga, el director general de AZ2, en mi programa de Grupo Fórmula.