El reto de nuestros días

Juan Carlos Ramos León.
Juan Carlos Ramos León.

El ser humano no vale ya por lo que es sino por lo que tiene o por lo que tiene capacidad de adquirir.

Seguramente usted no conoce el nombre de “Carlos Villeda Márquez”. Pero, también seguramente, sí ha escuchado hablar de “Proteo”, un perro pastor alemán que se ha convertido en tendencia últimamente por haber perecido ante las inclemencias del tiempo en Turquía, en donde se convirtió en héroe al ayudar a rescatar con vida a una persona y a recuperar de entre los escombros causados por los terribles terremotos que azotaron a aquel país los cuerpos de quienes lamentablemente perdieron la vida.

No cabe duda de que la naturaleza nos da todo tipo de lecciones. Es natural un desastre de aquellas proporciones y es admirable; lamentable que ocurra y que se cobre vidas, pero es admirable. Y el suceso da pie a otro también digno de admiración, como lo es el que este animalito se haya sobrepuesto a la adversidad del medio ambiente hasta donde pudo para hacer aquello para lo que fue entrenado: rastrear seres humanos. Y según he leído algunos testimonios de quienes lo entrenaron, sobresalía de entre los otros canes por su fortaleza y habilidad. Lamentable su pérdida, aunque el consuelo de todos es que no fue en vano.

Pero, con el debido respeto, creo que le hemos restado mérito a alguien y ese es, precisamente Carlos Villeda Márquez, su entrenador. Proteo no habría llegado de la nada a ponerse a rescatar víctimas de un terremoto no más por que sí; quizás lo habría hecho si su amo fuese quien se encontrara entre los escombros, pues su instinto sin duda lo habría conducido a eso. Pero para convertirse en un perro de rescate tuvo que ser entrenado para ello y fue muy bien entrenado, está claro: Por un ser humano.

¿Ha notado usted que, en redes sociales, se ha vertido una avalancha de videos y noticias de animales realizando proezas o demostrando conductas que pareciera que los seres humanos hemos abandonado? ¿Y ha notado, también, que los comentarios al respecto tienden a ensalzar a los animales y a denostar a los seres humanos? Sí, está claro que hay seres humanos que no merecerían ser considerados como tales. Pero parecería también que hay corrientes tendientes a destronar al ser humano como rey de la creación por motivos tan obscuros que resultarían muy difíciles de entender.

A mi se me ha ocurrido pensar que, si el ser humano es infravalorado entonces éste necesita de cosas para adquirir valor: necesita consumir. Y entonces no vale ya por lo que es sino por lo que tiene o por lo que tiene capacidad de adquirir, es decir, el ser humano no vale ya por su dignidad, sino por lo que se le “echa” encima.

Creo que esta generación está adquiriendo el reto de reconciliarse consigo misma. De devolver al pedestal del que se ha derribado la efigie del hombre. Porque créame que si no lo hace pondrá en graves aprietos a los que vienen detrás.

[email protected]




Más noticias

juan carlos ramos leon
juan carlos ramos leon
juan carlos ramos leon
juan carlos ramos leon
juan carlos ramos leon
juan carlos ramos leon

Contenido Patrocinado