Temblores
El síntoma más sencillo de detectar es cuando el perrito está temblando, pues eso indica que no logra regular su temperatura.
Pero, este malestar no se debe confundir con los temblores por nervios, pues hay muchos perros que suelen comenzar a desarrollarlos ante una situación que les causa ansiedad, estrés o miedo.
Orejas frías
Otra señal es si al tocar las orejas de tu “lomito” están frías. En ese caso es mejor ayudarlo a entrar en calor.
Se acurruca y presenta somnolencia
También puedes detectar estos síntomas si tu perrito se acurruca y mete su cola entre las patas, pues es la respuesta de su cuerpo para tratar de entrar en calor.
Asimismo, puede llegar a sentirse más cansado de lo normal y presentar somnolencia.
Músculos rígidos
Acariciar y masajear al animal también puede revelar si su cuerpo está respondiendo al frío, pues debido a las bajas temperaturas sus músculos pueden presentar rigidez.
Esto porque crece la tensión en sus tejidos y provoca la contracción muscular.
Pero ojo, si tu perrito presenta rigidez y consideras que el clima no es frío, debes consultar a un experto.
Piel seca
También a los animales se les reseca la piel con los climas fríos, por lo que se recomienda que en la temporada invernal los revises constantemente.
En el caso de este síntoma, los animales también pueden desarrollar picazón.