Conoce la Casa Grande de Trancoso Zacatecas, escenario de películas de Antonio Aguilar
El origen de este vestigio está relacionado a la construcción del Camino Real de Tierra Adentro.
TRANCOSO.- A sólo 20 kilómetros de la capital zacatecana se encuentra la Casa Grande de la exhacienda de Trancoso, uno de los vestigios arquitectónicos más importantes de la región y locación recurrente de Antonio Aguilar.
Conocida en el siglo XVI como Hacienda de San Juan de Trancoso, este lugar perteneció a los García Salinas una de las familias más importantes de Zacatecas. Asimismo, tuvo un marcado florecimiento económico debido a la producción de ganado mayor y menor.
Su origen está relacionado a la construcción del Camino Real de Tierra Adentro, pues a finales del siglo XVII la hacienda formaba parte de la ruta de esta importante vía.
La familia García construyó importantes obras arquitectónicas de Trancoso, entre ellas la Casa Grande, el Templo de Nuestra Señora de Guadalupe y el Mausoleo donde descansan los restos de la familia.
Esta casa perteneciente a la exhacienda, posee un estilo neoclásico, cuyos adornos de cantera roja cubren las 11 ventanas frontales y seis laterales de la fachada principal.
La construcción consta de un ala rectangular de dos plantas con patio porticado al centro, así como tres patios interiores y varios corredores ornamentados con pilares de capitel sobrio.
Trancoso: una de las locaciones favoritas de Antonio Aguilar
La Casa Grande de Trancoso fue lugar donde Antonio Aguilar desarrolló diferentes películas históricas y que forman parte del patrimonio de los zacatecanos.
Antonio Aguilar Barraza fue creador de diferentes películas históricas desarrolladas en Zacatecas y Trancoso fue uno de sus lugares favoritos para filmar los largometrajes.
Las películas del Charro de México que se realizaron en la exhacienda de Trancoso están Emiliano Zapata (1970), La muerte de un gallero (1977), Soy el hijo del gallero (1978) y Benjamín Argumedo (1979).
La Casa Grande no fue la única locación, pues en las escenas se puede observar parte de algunos cerros y caminos representativos del municipio. Los lugares identificados son “el socavón”, “la cueva” y los arcos de la alameda.
Durante las filmaciones, algunos habitantes de Trancoso fueron contratados como extras dobles de los personajes pues parte del Casco de la exhacienda pertenece a domicilios particulares. Es por ello que los trancoseños formaron parte de estas legendarias producciones.
Cabe mencionar que Antonio Aguilar no ha sido el único interesado el filmar producciones cinematográficas en el municipio. También se han desarrollado otros proyectos como Quemar las naves (2007) y El atentado (2010).