¿Un cafecito?

Hoy quiero tratar un tema con usted en honor de esa bebida que nos despierta, cambia de humor y logra que arranquemos actividades de una manera diferente a cuando no lo consumimos. Muchos mitos se escuchan sobre este elixir divino donde su posición es casi comparada con el veneno, que la cafeína te puede matar (lo cual es cierto pero en cantidades extremadamente excesivas), que es muy malo, etc. La realidad es que actualmente se han hecho muchos estudios y para los que disfrutamos de una o varias tazas de café al día simplemente nos cambia drásticamente el panorama.

Antes de entrar de lleno al tema de los beneficios del café, bien vale la pena y como es mi costumbre, darle una vuelta a sus orígenes y otras curiosidades de esta singular bebida, la cual recorre un largo camino desde la plantación hasta la taza que disfrutamos en casa, en la oficina o en los trayectos mañaneros hacia un destino definido.

El café es originario de Etiopía, los primeros cafetos se encontraron en el siglo 11 así como los árboles de café y se descubrieron las propiedades de las semillas encerradas en su fruto. Actualmente el café es cultivado en muchas partes de zonas tropicales y subtropicales de África, América y Asia.

Según su tipo (robusta o arábica) se planta en terrenos por encima de los 800 metros de altitud sobre el nivel del mar o en zonas más bajas. Brasil, Vietnam, Colombia, Indonesia, Etiopía, Honduras e India son los principales productores de café a nivel mundial y en ellos se concentra más del 80% de su producción global.

La recolección del mismo y según su procedencia se puede hacer de forma manual o mecanizada. La diferencia entre una y otra es que a mano se pueden seleccionar los frutos que están en su punto de maduración y claro está, es la más aconsejable para obtener una extraordinaria calidad. El volumen de café que produce un cafetal es variable según las condiciones de cultivo, pero en una hectárea se pueden recoger cerca de 800 kg al año.

Ya que se recogen las cerezas de café de la planta, existen dos métodos para llegar al grano de café verde listo para tostar los cuales con seco y húmedo. El método seco es el más sencillo debido a que no necesita de grandes infraestructuras para lograrlo. Una vez recogidas las cerezas, se extienden en una superficie y se dejan secar, este proceso dura varias semanas hasta que el fruto se endurece. Este método es el tradicional y se practica en zonas como Etiopía donde se descubrió esta bebida, pero ojo, si el secado no es uniforme dará como resultado sabores desagradables.

En el método húmedo las cerezas se pasan por agua para la separación de frutos maduros de las hojas, ramas y defectuosos. Posterior a esto se retira la cáscara del fruto y el interior para ponerse a fermentar entre 12 y 36 horas en tanques de mucha capacidad. Dicha fermentación que puede ser en seco o en agua permite retirar más fácil la pulpa, aparte de que aporta sabores y matices al café en su proceso final.

Después se procede a lavar a conciencia los granos y se ponen a secar. Como se podrá dar cuenta, en este método se requiere de más maquinaria pero asegura una calidad más homogénea, lo que hace que este sea el más usado actualmente.

Ya sea por el método seco o húmedo, al final de estos procesos se tienen los granos de café limpios y a punto para ser tostados. El proceso es largo desde la plantación hasta la semilla lista para consumirse, pero gracias al paso por este camino apasionante se tiene una diferencia y marca el valor de la procedencia del café.

Según la escuela de salud pública de Harvard, entre dos y cinco tazas de café al día no son buenas, son excepcionales, buenas, útiles y muy benéficas para la salud ya que su consumo reduce las posibilidades de adquirir diabetes mellitus, reduce el riesgo de enfermedades cardiacas así como de infartos. Esta cantidad diaria de café reducirá las probabilidades de adquirir cáncer de hígado en ambos sexos y cáncer de endometrio en mujeres.

Está comprobado que el tomar café reduce el riesgo de tener párkinson y de la existencia de cuadros depresivos en las personas. Si usted consume de 2 a 5 y tazas de café reduce el riesgo también de tener una muerte temprana en comparación con quien no lo toma.

Otra institución muy famosa, la Johns Hopkins agrega que el que toma regularmente café reducen el riesgo de Alzheimer. El café tiene una gran cantidad de antioxidantes lo que le facilita al cuerpo el procesamiento, lo que fortalece la capacidad del páncreas para la producción de insulina. Tomando café reduce también las posibilidades de padecer cáncer de colon.

Finalmente decirle que el consumir café no solo es bueno para su cuerpo, también para la economía ya que en el mundo diariamente se consumen 2250 millones de tazas de café ya que después del agua es la bebida más tomada. El lugar donde más se toma café en el mundo es en los Estados Unidos con un consumo per cápita de 6 kg al año.

Si le dicen que el café es malo le aseguro hay cosas peores. Si consume café habitualmente sígalo haciendo y disfrútelo ya que vida solo hay una.

Hasta la próxima.