Sin duda alguna, el evento del año
El Gran Premio de México, este año dejó una derrama económica superior a los 18 mil millones de pesos, según la CANACO de la CDMX.
Recuerdo que en el 2019 existía la amenaza de que la Fórmula 1 tuviera su última carrera, misma que llegó acompañada con las políticas de austeridad del nuevo gobierno de esos ayeres. Don Andrés y la alcaldesa de la capital en esa época y la que ahora actualmente es nuestra presidenta, anunciaron que no habría más aportación de dinero público para la carrera ya que el fondeo de esos eventos se había comprometido a la construcción del “Tren Maya” y otras obras faraónicas que ya hemos manoseado mucho.
Posterior a meses de negociaciones, la solución para que el evento se mantuviera en México se logró gracias a la creación de un fideicomiso privado y adicional a esto, se debió de remodelar el Autódromo Hermanos Rodríguez con un costo considerable. Actualmente se sabe que empresas del consorcio de Carlos Slim y los bancos Santander y Citibanamex fueron los que cooperaron en vez de la parte gubernamental.
A la firma del acuerdo, el director de la F1 mencionó que hacían carreras en todo el mundo pero que el Gran Premio de México era de los más especiales en su calendario.
Comento ésto debido a que a pocos días de realizada la edición del Gran Premio de este año, la jefa de gobierno actual Clara Brugada, confirmaba la continuidad de la F1 en nuestro país. A los que nos gusta la “Gran Carpa” sabemos que el contrato culmina en el 2025, hecho que generaba incertidumbre entre los aficionados nacionales.
Afortunadamente para nosotros, los fanáticos y los turisteros de la CDMX, la funcionaria despejó dudas y habló de la continuidad del evento, ya que asegura la puesta en boca del mundo a nuestro país y la CDMX, además de que se destaca por ser de los mejores del calendario.
Cabe mencionar que desde el 2015, año con año se ha realizado este evento, con excepción del 2020 que se suspendió por el tema de pandemia. Y no podemos dejar atrás la responsabilidad del nuevo auge que el automovilismo le debe a Sergio Pérez, quien compite en la máxima categoría desde el 2011.
¿Porqué menciono esto? Independiente a lo que se critique o diga del Gran Premio, este año dejó una derrama económica superior a los 18 mil millones de pesos, según Versión de José de Jesús Rodríguez, presidente de la CANACO de la Ciudad de México.
Una de las grandes ventajas que aporta esta fiesta es que desde que llega el turista, toma cualquier tipo de transporte, y sumemos lo que consuma, lo que compre en un centro comercial, más lo que se le antoje, es dinero fresco que entra a la ciudad y que no se contaba en arcas.
Claro está que esta derrama representa mayor empleo y mejores condiciones laborales para los colaboradores, punto que obliga a los prestadores de servicios a prepararse realmente para la recepción de los asistentes al GP de la Ciudad de México.
No debemos olvidar la creatividad de los comerciantes locales ya que con nombres en paquetes como “Pérez o Verstappen” lograron ofrecer sus productos a mejores precios.
Si hablamos de hospedaje, le comento que la CDMX cuenta con 710 hoteles y 62 mil habitaciones. La ocupación hotelera alcanzó un promedio Del 79.2% con alrededor de 132,667 habitaciones ocupadas en los 3 días.
Es importante mencionar la relevancia del evento comentada por la actual secretaria federal de turismo, Josefina Rodríguez quien subrayó lo importante de estos eventos deportivos internacionales, los cuales proyectan a nuestra capital como un destino turístico mundial y accesible.
Es de mi agrado la visión de nuestra secretaria, quien destaca que el impulso al turismo y los eventos deportivos contribuyen al fortalecimiento del turismo comunitario y social, promovido por la administración federal.
Sin dudarlo y a escala, no debemos olvidar los beneficios que trae consigo esta clase de justas deportivas en los estados, donde en ciudades como nuestra capital, deben ser bienvenidos y apoyados por nuestras autoridades tales como el fútbol y basquetbol profesional, eventos de motociclismo y carreras deportivas.
Veremos de qué manera pintan a futuro eventos tan importantes como el Gran Premio de México, no olvidemos el mundial de fútbol que se celebrará en nuestro país, Canadá y los Estados Unidos. Sin duda se plantean como retos que pueden ser superados con el talento y experiencia de los organizadores.
Para terminar y como dato adicional me llama la atención las “mejoras obligadas” que le han tenido que hacer al Aeropuerto Internacional Benito Juárez, donde con nuevas salas de espera y una mejor logística han mejorado la puntualidad en salidas y llegadas, pero ¿y el AIFA? A pesar de haberse llevado la carga aérea para allá (cuando la mejor opción era Toluca) y lo que le han metido en vías para su acceso, seguimos viendo lo costoso que ha salido el manotazo en la mesa de nuestro ex-presidente. Como diría mi abuelita, salió mas caro el caldo que las albóndigas, sigue siendo una incógnita cuánto más le tienen que meter a los aeropuertos destinados a la zona metropolitana; que gasto tan absurdo de recursos públicos.
Así las cosas, disfrute su fin y para terminar le digo que hay que recordar a los muertos y abrazar a los vivos. Hasta la próxima.
Hasta la próxima.