
Saúl Monreal Ávila, docente de la Unidad Académica de Derecho de la UAZ.
Quiero expresar de manera especial mi felicitación al sacerdote Juan Diego Chávez García, quien ha sido designado como nuevo rector del Santuario de Plateros, en Fresnillo, Zacatecas.
En nuestro andar político siempre hemos tenido claro que el respeto a todas las expresiones religiosas es un principio fundamental de la convivencia social. A lo largo de los años hemos cultivado amistades sinceras y profundas con hombres y mujeres de fe: católicos, evangélicos, cristianos, testigos de jehová, adventistas, judíos; así como gente de todas las creencias, con quienes construimos sólidas relaciones de hermandad, respeto y confianza.
En ese variado mundo de fe, este viernes se dio un suceso que no quiero dejar desapercibido, por lo que quiero expresar de manera especial mi felicitación al sacerdote Juan Diego Chávez García, quien ha sido designado como nuevo rector del Santuario de Plateros, en Fresnillo, Zacatecas. Este nombramiento llega a mi tierra natal, y además nos alegra por ser Plateros la casa del Santo Niño de Atocha, y es uno de los centros de devoción y peregrinación más importantes del país.
Durante nuestra gestión como presidente municipal de Fresnillo, tuvimos la convicción de que la fe debía caminar de la mano con el desarrollo. Por ello impulsamos una profunda transformación en la infraestructura social de Plateros: modernizamos la calzada del peregrino, construimos puentes peatonales y un andador digno para los peregrinos; rehabilitamos calles, banquetas, drenajes y alumbrado público; además, renovamos espacios de valor simbólico como la capilla del Cerro de la Santa Cruz, como un nuevo punto del corredor turístico y su santo niño Gigante, donde edificamos escalinatas, accesos y áreas de descanso. Todo ello con la visión de fortalecer el turismo religioso y devolverle a Plateros su esplendor como “la tierra de la fe y los milagros”.
Hoy, gracias a ese esfuerzo colectivo, Plateros se proyecta de nuevo como un punto de encuentro nacional para miles de devotos y como un motor de desarrollo para Fresnillo. Estamos convencidos de que la llegada del padre Juan Diego Chávez García contribuirá a seguir alimentando la espiritualidad y el sentido comunitario de nuestra gente.
Quiero subrayar también que mi apoyo nunca se limitó a una sola religión, y aunque siempre hemos defendido el carácter laico del Estado, también reconocemos la riqueza espiritual de todas las religiones. En Fresnillo hemos encontrado aliados en comunidades católicas, cristianas, evangélicas y en cada persona de buena fe que trabaja día con día por el bien común.
Soy un hombre de fe y de tradiciones, y creo firmemente que todo aquello que nos acerque a ser mejores seres humanos debe celebrarse.