México merece respeto

El respeto a la democracia, y a la autodeterminación  de los pueblos, es algo que México siempre ha tenido como un Pilar fundamental para llevar a cabo nuestras relaciones con otros países, la clase política mexicana también ha dignificado ese valor ante otras naciones; sin embargo, amigas y amigos, en días pasados vimos las reprobables declaraciones del candidato presidencial republicano  estadounidense, Donald Trump, hacia México, hacia los procesos políticos y hacia la administración mexicana.

La falta de respeto con que se dirigió nuestro país es inadmisible, es algo que no podemos tolerar y que no aceptamos aun sabiendo la forma en que el candidato presidencial se ha conducido y ha dirigido a su país con ese estilo tan sectario y lleno de prejuicios.
No es una casualidad que la división interna y los conflictos políticos con las minorías en la Unión Americana se hayan multiplicado en su periodo de gobierno; no es casual que la falta de diálogo y empatía política haya hecho más grandes las diferencias de nuestro vecino del Norte con otros países de Europa, Asia, el medio y el lejano oriente en ese tiempo.

Apenas hace unos días, vimos cómo el candidato Trump, fue víctima de un atentado que todos condenamos porque no creemos en ese camino sea, pero de igual manera tampoco aceptamos la violencia y la provocación política, verbal o psicológica que puedan ejercer ciertos líderes políticos, nada los justifica aunque se encuentren en periodo de campaña y todo lo quieran manejar como un show mediático para atraer votantes y simpatías.

¡No!, nosotros no le damos lugar para dirigirse así a nuestro país, no aceptamos que se nos quiera humillar, burlar o sobajar, creemos que como vecinos y socios comerciales que somos, debemos conducirnos en el camino del respeto y el desarrollo, pero nunca bajo opiniones de ese nivel.

Desde aquí, como senador electo e integrante del poder legislativo del país, condeno esas declaraciones y exijo respeto, espero que nuestra representación diplomática también haga lo propio, pues estamos convencidos que con el diálogo y el respeto todo se puede lograr.

Nos leemos en la próxima, soy su amigo Saúl Monreal.