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Las monedas virtuales o criptomonedas más conocidas son Bitcoin y Ethereum, pero se continúan creando nuevas.
Al hablar de las criptomonedas, dijo la Licenciada en Mercadotecnia, Giselle Arellano Ávila, nos referimos a moneda virtual o criptodivisa, “token” o “moneda”, que utiliza tecnología de criptografía para verificar y asegurar transacciones, es decir, es dinero digital, lo que significa que no hay monedas ni billetes físicos, todo es en línea, donde se puede transferir una criptomoneda a alguien en internet, sin un intermediario, como un banco. Las monedas virtuales o criptomonedas más conocidas son Bitcoin y Ethereum, pero se continúan creando nuevas cripto-monedas, como las Binance Coin, Tether y Solana.
Con esta moneda virtual, indicó Arellano Ávila, la gente podría usar criptomonedas para hacer pagos rápidos y para evitar los cargos de transacción. Algunas personas podrían adquirir criptomonedas como una inversión, con la esperanza de que aumente su valor.
Las criptomonedas se pueden comprar con una tarjeta de crédito o, en algunos casos, a través de un proceso llamado “minería” señaló Giselle Arellano Ávila al agregar que las criptomonedas se almacenan en un monedero o cartera digital, ya sea en línea, en su computadora o en otro soporte físico.
De modo que el hablar de las ventajas de las criptomonedas no se refiere a las monedas en sí, subrayó Arelleno Ávia sino a la infraestructura en la que se apoya, es decir, la blockchain o cadena de bloques, que es un registro de almacenamiento de datos descentralizado, que rastrea todas las transacciones que se realizan en él.
En el mercado actual destacó Giselle Arellano Ávila que hay más de 10 mil criptomonedas, cada una de ellas con sus peculiaridades aunque todas tienen aspectos en común, como la tendencia a registrar repentinos picos (y caídas) de valor. Los precios dependen principalmente de la oferta de monedas de los mineros y de la demanda por parte de los compradores.
Esta dinámica de oferta y demanda, -continuó- puede generar importantes beneficios tales como los que se obtuvieron en el 2015 cuando el precio de Bitcoin fue de 23 dólares otorgando beneficios a quienes creyeron en las criptomonedas, aunque por ahora sólo pocas empresas, venden esa moneda en países donde muy pocos pagos han estado sujetos a efectos adversos de la inflación, por ello en el mundo, esta moneda está más segura que el dólar y más cercana al tipo de cambio.
En este punto, Giselle Arellano Ávila resaltó que con las criptomonedas en determinado momento se podrá decir adiós a los bancos ya que los sistemas financieros giran en torno a intermediarios que se encargan de procesar las transacciones. Esto significa que, si haces una transacción, estás depositando tu confianza en uno o varios de estos intermediarios por lo que la blockchain y las criptomonedas representan una alternativa, todo el mundo tiene acceso, desde cualquier lugar, por lo que permiten participar en los mercados financieros y realizar transacciones sin ningún tipo de intermediario.
Finalmente subrayó que otra de las ventaja de las criptomonedas —respecto de los bancos— es que los mercados de éstas; nunca cierran, se registran transacciones las 24 horas del día, no hay que esperar para comprar, vender u operar con criptomonedas, como ocurre con la Bolsa de Nueva York, el NASDAQ y otras bolsas del mercado de valores, pues la repercusión ha sido tal que las bolsas tradicionales se están planteando operar fuera de los horarios bancarios habituales, aunque de momento es algo que todavía queda lejos. Así, para los inversores que están en activo las 24 horas del día, las criptomonedas podrían ser la mejor forma de obtener beneficios fuera de los horarios de trabajo convencionales.