El cuidado de las llantas de tu coche es un asunto serio, ya que una falla en una de las ruedas puede llegar a traerte serias complicaciones, como pueden ser accidentes o la falta de control de tu vehículo, así como dejarte parado en el camino. Para evitar que llegue a sucederte alguna de estas … Leer más
El cuidado de las llantas de tu coche es un asunto serio, ya que una falla en una de las ruedas puede llegar a traerte serias complicaciones, como pueden ser accidentes o la falta de control de tu vehículo, así como dejarte parado en el camino.
Para evitar que llegue a sucederte alguna de estas desafortunadas situaciones, aquí podrás conocer las señales para saber cuándo es preciso cambiar tus neumáticos.
Profundidad de la banda de rodamiento
Según el sitio de internet Autocosmos.com.mx, la banda de rodamiento de una llanta no debe tener menos de 1.6 milímetros de profundidad. Si eres alguien que usa su vehículo regularmente en superficies lisas y húmedas, tus llantas deberían tener el doble de ese número.
Barra indicadora de uso
Algunas llantas nuevas actualmente traen un sistema conocido como barras indicadoras de uso. Estas son invisibles o apenas se alcanzan a ver cuando los neumáticos son nuevos o con poco uso que gradualmente se empiezan a notar tan pronto la cubierta se vaya acabando.
Visualmente son barras planas de goma que corren perpendicularmente a la dirección de la banda de rodamiento. Si una o más de éstas se encuentran evidentes en una llanta, el borde se está terminando. Esto debería ser bastante obvio al momento de pasar por un charco, ya que el neumático irá dejando huellas húmedas de las barras.
Grietas en la pared lateral
Afortunadamente hacer una revisión en esta área es relativamente fácil. Busca rastros o cortaduras en la pared, éstas son evidentes a simple vista. Sí las hay y estas empiezan a verse muy mal, tendrás que comprar llantas.
Protuberancias y burbujas en la llanta
Muchas veces, cuando la superficie de una llanta empieza a debilitarse, el resultado puede ser que salgan protuberancias o burbujas que se extienden a lo largo de la misma. Por eso, si notas que tu llanta tiene ampollas o abultamientos, es entonces momento de cambiarlas.
Demasiada vibración
Puede haber muchas causas para que tu vehículo vibre, desde problemas con la suspensión o la falta de alineación y balanceo. Pero esto también puede indicar que hay algo mal dentro de un neumático. Incluso, aunque esto no fuera la causa del problema, la agitación lograría dañar la llanta.
Si tí tienes alguno de estos problemas y buscas cambiar tus llantas ahora que estás a tiempo, visita a alguna de las concesionarias autorizadas de llantas como Tornel, o busca más información en su página de internet tornel.com.mx
Imagen Zacatecas – Redacción