
Foto: AGENCIA CUARTOSCURO.
El tendedero incluye los nombres de las víctimas mortales, así como de quienes aún luchan por sus vidas y permanecen hospitalizados.
CIUDAD DE MÉXICO.- A un mes de la tragedia ocurrida en La Concordia, en los límites de la alcaldía Iztapalapa con el municipio de Los Reyes La Paz, decenas de mujeres tejedoras de la periferia de la Ciudad de México, municipios conurbados del oriente del Valle de México y diversas entidades del país, colocaron este sábado un tendedero con los nombres de las 31 personas fallecidas tras la explosión de una pipa en ese distribuidor vial.
La propuesta surge de la rabia, del dolor y de la indignación. “Queríamos elaborar un memorial bordado para que este hecho no se olvide y recordar que en la periferia las vidas importan”, dijo Fernanda, joven tejedora, vecina de Iztapalapa e impulsora de la iniciativa.
El tendedero incluye los nombres de las víctimas mortales, como Irving Ali Yael González Aranda, Adolfo Franco Madrigal, Misael Cano Rodríguez y Alicia Matías Tadeo, conocida como la “abuelita heroína”.
Así como de quienes aún luchan por sus vidas y permanecen hospitalizados, como la nieta de Alicia Mateos, Jazlyn, la bebé de dos años que fue trasladada al hospital Shriner’s Children en Galveston. Alicia protegió con su cuerpo a su nieta, lo que logró salvarle la vida.
Fernanda relató que la idea de bordar los nombres de las víctimas de la tragedia surgió de una charla entre amigas y se lanzó una convocatoria en redes sociales, la cual tuvo una respuesta positiva, no solo en la Ciudad de México, sino también de personas de Coahuila, Nayarit, Quintana Roo e Hidalgo.
Se enteraron en redes sociales y cada una bordó uno o más nombres. “Queremos sanar la herida que quedó abierta con esta tragedia, visibilizar que no somos solo cifras ni mano de obra; somos personas con vidas valiosas. Las familias afectadas quedaron rotas por el fuego, este memorial es también un acto de reconocimiento y memoria”, explicó.
El homenaje incluye bordados dedicados al medio ambiente, los animales y los árboles afectados, así como a personas en situación de calle que vivían en la zona “y de los cuales poco se supo”, afirmó Fernanda.
“Es un dolor colectivo, se reconoce en el dolor de los demás, con este memorial esperamos contribuir a aliviarlo un poco”, afirmó.
En la llamada Zona Cero donde volcó y explotó la pipa de la gasera Silza, cargada con cerca de 50 mil litros de gasera LP, en el Puente de La Concordia, este sábado durante todo el día, se observó la llegada de amigos de algunas de las personas fallecidas, de vecinos que acuden con flores, velas, ofrenda y agua a colocarlas en los altares improvisados en el lugar.
A la Zona Cero acudió también un grupo de mujeres encabezadas por Gloria Martínez, quien se identificó como terapeuta holística, para realizar una ceremonia de limpieza y oración en el lugar del siniestro.
El grupo llevó rosas blancas y rojas, veladoras y “elementos simbólicos como tierra, fuego, agua e incienso, con el propósito de purificar el espacio y acompañar espiritualmente a las víctimas y sus familias”, dijo Gloria Martínez.
“Venimos a hacer un rezo, un rosario por el descanso de las almas de las personas que aquí perdieron la vida, también para pedir bendiciones para este lugar, ayuda celestial para los que están en los hospitales y todavía padecen esta situación”, explicó.
Las mujeres elevaron oraciones por quienes murieron y “por los que ese día lograron sobrevivir”.
Hasta el momento suman, 31 las personas fallecidas, nueve permanece en hospitalizadas y 44 han sido dadas de alta tras el incidente del 10 de septiembre