

Claudia Sheinbaum Pardo en la mañanera. | Foto: Cortesía
La mandataria advirtió sobre el riesgo de una escalada regional y reiteró los principios de la política exterior mexicana.
CIUDAD DE MÉXICO.- La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo hizo este martes un enérgico llamado a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para que asuma un papel mucho más protagónico ante la creciente escalada de tensiones entre Estados Unidos y Venezuela, luego de que el presidente estadounidense Donald Trump confirmara un ataque a una instalación portuaria en territorio venezolano, presuntamente vinculada al narcotráfico.
Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, la mandataria reiteró los principios constitucionales de la política exterior mexicana, entre ellos la no intervención, la autodeterminación de los pueblos y la solución pacífica de las controversias. “Rechazamos cualquier forma de intervención extranjera y hacemos un llamado al diálogo para evitar un mayor escalamiento que pueda derivar en un derramamiento de sangre”, subrayó.
El pronunciamiento se dio un día después de que Trump declarara en entrevistas y mensajes públicos que fuerzas estadounidenses “golpearon” una zona de atraque en la costa venezolana, donde presuntamente se cargaban embarcaciones con drogas, como parte de su estrategia antidrogas. De acuerdo con fuentes estadounidenses citadas por Reuters, The New York Times y CNN, el ataque habría sido ejecutado con drones, destruyendo la instalación portuaria.
Se trata de la primera operación militar conocida en territorio venezolano desde el inicio de las acciones estadounidenses en septiembre de 2025, lo que ha encendido alertas en la comunidad internacional por un posible endurecimiento del conflicto.
Hasta el momento, el gobierno de Nicolás Maduro no ha emitido una postura oficial sobre el incidente específico, aunque anteriormente ha denunciado que las acciones de Washington responden a intereses sobre los recursos petroleros venezolanos, bajo el argumento del combate al narcotráfico.
Sheinbaum recordó que ya en diciembre había criticado la inacción de la ONU frente al bloqueo naval y las incautaciones de petroleros venezolanos ordenadas por Estados Unidos, por lo que reiteró la necesidad de una intervención diplomática inmediata del organismo internacional.
La postura del gobierno mexicano generó opiniones encontradas en redes sociales: mientras algunos usuarios respaldaron la defensa del principio de no intervención, otros cuestionaron la falta de una condena explícita al gobierno venezolano y pidieron mayor atención a los problemas internos del país.
Este episodio se enmarca en una estrategia estadounidense iniciada desde agosto, que ha incluido ataques a embarcaciones sospechosas, un bloqueo a exportaciones petroleras y un amplio despliegue naval en el Caribe. Especialistas advierten que una mayor escalada podría tener repercusiones regionales y afectar la estabilidad de América Latina.