Engaño en redes un 14 de febrero

Una de las bondades de la tecnología es que nos conecta con todas las personas, esa conexión se convierte en afectos.

Esta festividad se remonta al siglo III en Roma, donde un sacerdote llamado Valentín se opuso a la orden del emperador Claudio II, quien decidió prohibir la celebración de matrimonios para los jóvenes, considerando que los solteros sin familia eran mejores soldados por tener menos ataduras y vínculos sentimentales. Valentín se jugaba la vida cada día para poder unir a parejas en matrimonio.

En el transcurso de la historia, esta festividad se celebra para conmemorar a San Valentín como el símbolo del amor, la amistad y la empatía entre las personas, se creé que esta decisión fue tomada entre el año 496 y 498, siglos más tarde se sigue celebrando en lo público y en lo privado, gracias a la navegación vía internet.

Una de las bondades de la tecnología es que nos conecta con todas las personas, esa conexión se convierte en afectos, plataformas digitales como Tinder, Bumble, Solteros con Nivel, Solteros50, Amor40, be2, Amo Latina, c.date, por señalar sólo algunas de las más famosas según google, se han convertido en espacios que fueron creados para poder interactuar y conocer personas con cualquier propósito, es decir, se puede acceder sólo para ampliar aspectos sociales o también para encontrar pareja, a través de una pantalla y lo que cada persona deseé plasmar en su perfil es como en esa búsqueda se hace el match, palabra inglesa que significa uno de un par, pero no es más que encontrar a la persona compatible contigo.

Lo cuestionable aquí es que, en ese match, puedes toparte en la plataforma, con esa persona que “aparenta ser compatible” para obtener un beneficio que puede ser robo, extorsión, suplantación de identidad, violación, trata de blancas, entre otros delitos, es decir, esa aparente semejanza que utiliza el usuario ilusionado, puede tratarse tras la pantalla de un ciberdelincuente o un estafador.

¿Y qué podemos hacer? Aquí te brindo algunos consejos:

  1. Lo primero es hacer uso de contraseñas y jamás compartirlas tratándose de éstos casos de acercamiento primario, evitando accesos no deseados por parte de cualquier desconocido.
  2. No brindar información personal innecesaria en ninguna red social o páginas web, pues cualquier dato adicional es utilizado por este tipo de delincuentes ya que suelen ser personas inteligentes y con un perfil manipulador.
  3. No compartir fotos íntimas, así como del hogar donde habitan los usuarios, ya que al hacerlo se expone la intimidad por completo tanto de la persona como la de su hogar.
  4. Evitar en la medida de lo posible redes Wi-Fi abiertas.
  5. Se recomienda que las conversaciones entre los usuarios de estas plataformas sean únicamente a través de ellas, no otorgando ninguna otra información personal pues en caso de que una persona sea denunciada, la misma plataforma digital interviene de acuerdo a sus métodos de seguridad, y así se evita el que una persona sea expuesta innecesariamente.
  6. Por último, añadiría, no creer todo lo que se lea sobre la persona en el perfil, es mejor actuar cuidadosa y mesuradamente pues como ya sabemos, todo lo que se publica en redes sociales cualquiera que esta sea no es la vida real, y ello es motivo más que suficiente como para cuidar nuestra identidad y privacidad, que es la mayor de las libertades con las que se cuentan actualmente he aquí donde aplica el dicho de “más vale solo, que mal acompañado”.

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