Debo decirlo… Vecinos incómodos

Son tiempos electorales y se aproximan momentos difíciles y muy complicados.

El pasado miércoles en la ciudad de Aguascalientes fue ejecutado el empresario Oscar Octavio Aguilar Vera originario de Fresnillo, Zacatecas, quien se encontraba en un restaurante de una de las zonas de mayor actividad económica y social de esa ciudad vecina. Según la información de la fiscalía de aquel Estado, el cual es gobernado por María Teresa Jiménez Esquivel del Partido Acción Nacional (PAN) y a pesar de que las investigaciones están en curso, no obstante, y como estamos en pleno proceso electoral, se consideró que políticamente era el momento propicio para pegarle al enemigo, bajo el argumento de “vamos con Todo” o “ahora o nunca” “el que perdona pierde”.

Ante ello, las autoridades administrativas municipales y estatales incluyendo a la Gobernadora de Aguascalientes, sin dejar de pasar el lamentable acontecimiento, se aventuraron a aprovechar esa coyuntura para atacar en primera instancia al senador Ricardo Monreal y en segunda, al Estado de Zacatecas que es gobernado por Morena y por David Monreal.

Las acusaciones oportunistas, infundadas y perversas de la autoridad hidrocálida sugirieron en primera instancia, que el empresario ejecutado era cercano al senador Ricardo Monreal y que, según ellos, formaba parte de esa cadena de homicidios que se realizaron en nuestro estado en días pasados, de manera posterior cambiaron la versión y corrigieron, declarando que había sido un conflicto al parecer por una disputa de una franquicia que estaba en litigio entre particulares.

Por su parte la gobernadora María Teresa Jiménez, en un tono enérgico y poco usual manifestó a los medios de comunicación y dijo “… que las personas en cuestión eran de Zacatecas…luego piensan que el venir a Aguascalientes pueden cometer cualquier delito y sentencio…en su Estado el que, la hace la paga…

En fin, como mencionamos en columnas anteriores son tiempos electorales y se aproximan momentos difíciles y muy complicados, pues la disputa electoral en esta coyuntura es de suma importancia para ambos proyectos políticos en el país, por ello, en la política como en la guerra todo se vale y consecuentemente estamos por ver cosas aún más lamentables quizá entre vecinos, como lo son Zacatecas y Aguascalientes, y más aún, por tratarse de entidades que están gobernadas por partidos políticos antagónicos y eso quizá será un ingrediente muy recurrente en los próximos meses, pues la interferencia político-electoral entre ambos estados está en su punto más álgido.

En materia de seguridad compartimos la respuesta que el senador Ricardo Monreal dio a la gobernadora del Estado panista, en el sentido de que es necesario que revise su percepción de donde proviene la inseguridad, pues también es vecina de uno de los estados más inseguros del país y con más alto índice delictivo en todos los rubros como es el estado de Guanajuato y que quizá por ser de la misma afiliación política no lo percibe y centra más su estrategia política hacia Zacatecas.

En fin, es politiquería y gajes del oficio del proceso electoral y quizá pasando ello, podamos retomar nuestra condición de buenos vecinos como siempre lo hemos sido, bueno antes de que se fueran de casa.

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