Logo Al Dialogo
Opinión

De Leones europeos de Dios a un León americano

De Leones europeos de Dios a un León americano

Opinión José Antonio Rincón

El nombre de León, que eligió el nuevo Papa ha sido recurrente, pues el recién electo es el número catorce. Es sin duda un nombre fuerte el de León.

José Antonio Rincón
|
14 de mayo 2025

El papado y los papas es una historia fascinante. Una institución milenaria de la iglesia de occidente que trasciende a todo el mundo. El papa como líder espiritual, es autoridad máxima en un sistema jerárquico; nombra a obispos, arzobispos y cardenales que le juran obediencia.

Después de la elección en un cónclave con normas de derecho electoral canónico y aceptar su cargo, elige su nombre que marcará su pontificado.

Un interesante dato es que nunca ninguno ha osado llamarse Pedro, como su primer antecesor, quizá por respeto.

El nombre de León, que eligió el nuevo Papa ha sido recurrente, pues el recién electo es el número catorce. Es sin duda un nombre fuerte el de León.

Me referiré a cinco de los antecesores del nuevo León americano.

El primer León reinó en el siglo V y fue el que salió hasta las goteras de la ciudad eterna para dialogar con Atila, Rey de los Hunos, que a punto estaba de hacerse de Roma, osadía le valió ser llamado El Grande y luego canonizado, tejiéndose leyendas hasta de conversión y milagrosas. Lo que no es de dudar es que fue un gran negociador político y salvó a su ciudad.

León IX, vivió en el siglo XI y es el que afrontó el gran cisma de oriente que supuso la separación de las iglesias de oriente y católica de occidente, que perdura en nuestros días.

Hasta quinientos años después tenemos a León X, de la familia Medici, el papa del renacimiento, florentino de cuna real, culto, político y dispendioso, de vida fastuosa y constructor en parte de la imponente basílica de San Pedro en el Vaticano. Tan dispendioso que casi acaba con el tesoro papal y hundido en deudas mandó predicadores a vender la salvación, las dichosas indulgencias, lo que provocó en gran parte el surgimiento de la Reforma protestante encabezada por Lutero.

Otro Medici en el siglo XVII, León XI que murió, ahora sí que en un santiamén, pues solo portó la tiara 26 días.

Y así llegamos hasta el siglo XIX en qué subió al trono de Pedro, León XIII, que trascendió a los primeros años del pasado siglo XX. Un pontífice longevo, pues pasó de los noventa años y produjo numerosas encíclicas, siendo la más importante y que trasciende a la actualidad la Rerum Novarum, de las cosas nuevas, es decir sobre la modernidad.

Esa encíclica ha sido, quizá como ninguna, motivo de otras dos, una a los cincuenta y otra en 1991 justamente llamada Centesimus Annus, es decir 100 años.

Y ahora más de cien años después nace el León número XIV, americano, de inmigrantes europeos, políglota, latinoamericano por la pastoral que ejerció en el Perú, hecho un poco a la carrera un influyente cardenal en la curia del fallecido Francisco, su protector. Y como él proveniente de una orden religiosa, que es la de los agustinos. Dos pontífices al hilo que vienen de congregaciones.

Dos grandes de la congregación de los agustinos han trascendido: el científico Mendel, padre de la genética moderna y Martín Lutero, filósofo y teólogo reformista. Y el ocho de mayo el vómito de la fumata blanca que emitió la chimenea de la capilla Sixtina, propició todo género de conjeturas y especulaciones que atiborraron los sitios del ciberespacio, mientras en el balcón de las bendiciones de la basílica de San Pedro apareció el León americano, de buena presencia y nervios incontenibles, aunque esbozando una sonrisa auténtica, que habla de alegría. Su León antecesor vivió la revolución industrial; él navega en la digital; paralelismos muy semejantes.

Ya veremos cómo ruge el León XIV americano andino, porque prejuzgar no es aconsejable.

Buena nueva que el patriarca de la iglesia ortodoxa Bartolomé a casi casi mil años del cisma de oriente haya expresado que asistirá a la asunción formal del nuevo papa y con voluntad de continuar en la senda del diálogo ecuménico, es decir de la unidad.

reproductor
Tik tak zac S.A. de C.V.- De no existir previa autorización por escrito, queda expresamente prohibida la publicación, retransmisión, edición y cualquier otro uso de los contenidos de este portal.