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La organización Nihon Hidankyo nació en 1956 y ha recopilado miles de testimonios de aquellos que sufrieron las consecuencias de los bombardeos.
NORUEGA.- El Premio Nobel de la Paz 2024 ha sido concedido a Nihon Hidankyo, una organización compuesta por sobrevivientes de los bombardeos atómicos de Hiroshima y Nagasaki, en reconocimiento a su incansable lucha por un mundo libre de armas nucleares.
El Comité Nobel noruego elogió al grupo, conocido como Hibakusha, por su valioso testimonio y su compromiso de que tales armas nunca vuelvan a usarse.
Durante la ceremonia de anuncio en Oslo, el comité destacó la relevancia de preservar la memoria de los que vivieron la devastación de 1945. “Un día, los sobrevivientes ya no estarán con nosotros como testigos de la historia”, advirtió el comité. Sin embargo, enfatizó que nuevas generaciones en Japón están llevando adelante su legado, compartiendo sus experiencias y mensajes sobre los horrores de la guerra nuclear.
La organización Nihon Hidankyo nació en 1956 y ha recopilado miles de testimonios de aquellos que sufrieron las consecuencias de los bombardeos. Muchos de estos sobrevivientes enfrentan problemas de salud crónicos debido a la exposición a la radiación. La organización se encargó de defender el desarme nuclear, participando activamente en conferencias internacionales y enviando delegaciones a la ONU para promover su causa.
Dan Smith, director del Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo (Sipri), celebró la decisión del comité, subrayando que el legado de los Hibakusha debe ser un recordatorio constante de los peligros de la guerra nuclear. En Hiroshima, alrededor de 80,000 personas murieron en el acto, mientras que en Nagasaki, cerca de 70,000 más fallecieron en días posteriores a los bombardeos.
El primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, también elogió el galardón, destacando su significado para quienes han trabajado durante años por la abolición de las armas nucleares. Nihon Hidankyo recibirá un reconocimiento de aproximadamente un millón de dólares como parte del premio, que es el 105º otorgado desde la creación del Nobel de la Paz en 1901.
El comité de Nobel subrayó que su decisión se encuentra firmemente anclada en los principios de Alfred Nobel sobre la promoción de la paz y la reducción de ejércitos. Aunque las armas nucleares no existían en su tiempo, la importancia del premio creció en un contexto mundial donde el tabú contra su uso se desafió por diversas potencias nucleares.
Jørgen Watne Frydnes, presidente del comité, reafirmó que las historias de los Hibakusha son un recordatorio vital de la inaceptabilidad del uso de armas nucleares. En un momento en que las potencias nucleares continúan modernizando sus arsenales, la labor de Nihon Hidankyo es más relevante que nunca, instando al mundo a recordar el dolor y sufrimiento que causan estos armamentos.