Despenalizan la eutanasia y regulan el suicidio asistido en España

ESPAÑA.- El Parlamento de España aprobó una ley que despenaliza la eutanasia y regula el suicidio asistido en España. Con ello se estableció como un derecho y una prestación del sistema nacional de salud.

España se unió así a la reducida lista de países que permitirán a un paciente incurable recibir ayuda para morir y evitar su sufrimiento.

La propuesta fue hecha por el gobierno socialista de Pedro Sánchez, la ley que entrará en vigor en tres meses. Fue validada en el Congreso de los Diputados con 202 votos a favor, 2 abstenciones y 141 votos en contra.

Cabe destacar que España se convirtió en el séptimo país del mundo donde la eutanasia será legal.

La ley llegó al Congreso con la modificación que obliga a cada comunidad autónoma a crear, la Comisión de Garantía y Evaluación. Siendo necesaria para que los ciudadanos puedan ejercer su recién adquirido derecho a la eutanasia.

La eutanasia podrán solicitarla los mayores de edad que sufran “una enfermedad grave e incurable” o un “padecimiento grave, crónico e imposibilitante”. Incluso un “sufrimiento físico o psíquico constante e intolerable”.

La Comisión compuesta por personal médico, de enfermería y juristas, será responsable en última instancia de autorizar cada proceso.

El solicitante deberá confirmar varias veces el deseo de seguir adelante y podrá desistir en cualquier momento.

Polémica

Esta ley ha sido motivo de polémica social y política con un fuerte enfrentamiento entre izquierda y derecha.

La ministra de Sanidad, la socialista Carolina Darias, aseguró que España avanza en el “reconocimiento de los derechos”, así como en una sociedad “más justa y decente”.

La diputada María Luisa Carcedo, recordó a todos aquellos que han luchado por conseguir que se apruebe esta ley, que da “libertad para decidir”, resaltó.

Sin embargo por su parte, José Ignacio Echániz (Partido Popular) se refirió a que “no existe demanda social objetiva”.

Aseguró que comités de bioética consideran que la ley abre la puerta a “eutanasias no solicitadas” y España puede convertirse en un país de “turismo eutanásico”.

Durante su tramitación en el Congreso y el Senado, la ley de eutanasia ha tenido que superar los vetos presentados por el bloque conservador.

La ley nace con la amenaza de que estos partidos la llevarán al Tribunal Constitucional de la mano de organizaciones provida.