Hechizo para alejar las penas y los problemas
FRASE DEL DÍA: No soy lo que me ha pasado. Soy lo que decido ser.
Necesitarás:
- Un huevo blanco
- Un plumón o marcador negro
- Un puño de sal gruesa
- Un árbol grande que nos ayude a transmutar.
Lo primero que vas a hacer es tomar el huevo en tus manos para impregnarlo de tu energía, visualizando todos tus problemas y el dolor que te ocasionan.
Una vez que los tengas en tu mente, comienza a escribirlos en el huevo, no importa que encimes las letras, lo importante es redactar absolutamente todo lo que cargas en él.
Al terminar de escribir llévalo a tu pecho y con mucha fe dirás:
“Hoy me libero de mis penas y a la Madre Tierra pido permiso para que por medio de la sabiduría y energía de este árbol yo pueda transmutar mi dolor.
Pido a la naturaleza lo reciba con amor, ya que con amor deseo sanar mi alma. Agradezco infinitamente que mis guías me trajeran hasta aquí.
Suelto y libero mi alma de (comienzas a leer o a decir lo que escribiste en tu huevo) Porque hoy tomo la decisión de ser feliz y merezco vivir en paz. Hecho está.”
Ahora haces un hoyo en la tierra. Partes tu huevo y visualizas cómo la yema concentra toda esa negatividad. Trituras el cascarón con tus manos y lo entierras junto con el resto.
Tapas el hoyo y con la sal trazas un círculo y sellaras dentro de él con una cruz en forma de una X. Para proteger nuestro ritual.
Pasando 3 meses, regresa al mismo árbol y ofrenda algo a la tierra cómo muestra de gratitud por el intercambio energético.