Muere el ganador del Premio Nobel de Química 1995, Mario Molina

Mario Molina, ganador del Premio Nobel de Química 1995. | Foto: Twitter.
Mario Molina, ganador del Premio Nobel de Química 1995. | Foto: Twitter.

La UNAM informó el fallecimiento a causa de un infarto, de Mario Molina, Premio Nobel de Química 1995.

MÉXICO.- Este miércoles, murió Mario Molina a los 77 años, quien fue Premio Nobel de Química 1995.

Su trabajo con respecto a la formación y desintegración del ozono lo llevó a obtener el Nobel.

La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) informó el fallecimiento de del investigador mexicano a causa de un infarto.

Al poco tiempo, Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, lamentó la muerte del doctor Molina.

De la misma forma, TV UNAM se sumó a la cadena de mensajes en los que lamentan la perdida del investigador mexicano.

El doctor Molina era ingeniero químico recibido en la UNAM en 1965, realizó un posgrado en la Universidad de Friburgo, Alemania.

Tiempo después obtuvo un doctorado en Fisicoquímica en la Universidad de California, Berkeley, Estados Unidos.

Fue uno de los principales investigadores de la química atmosférica.

En 1974, fue coautor con F.S. Rowland, del artículo sobre el adelgazamiento de la capa de ozono, como consecuencia a la emisión de algunos gases industriales, los clorofluorocarburos (CFC).

Debido a este artículo de investigación recibieron el Premio Nobel de Química.

Realizó colaboraciones con diversos expertos para enfrentar el problema de la degradación de la calidad del aire en las grandes ciudades del mundo.

Varios de sus aportes los realizó en torno a la solución de la contaminación atmosférica de la Zona Metropolitana del Valle de México.

El doctor Molina fue profesor e investigador en distintos institutos y universidades:

  • Instituto Tecnológico de Massachusetts 1989-2004
  • Universidad de California, Ivirne 1975-1979
  • Laboratorio de Propulsión a Chorro del Instituto Tecnológico de California (CALTECH) 1982 -1989

Además, durante ocho años fue uno de los 21 científicos que conformaban el Consejo de Asesores de Ciencia y Tecnología del Presidente Barack Obama.

Desde 2005 era presidente de un centro de investigación y promoción de políticas públicas, mismo que lleva su nombre.

Ahí realizaba estudios estratégicos sobre energía, medio ambiente y sobre todo campos de cambio climático y calidad del aire.