FOTO: Rodrigo Reyes Mugüerza, secretario general de gobierno
El Gobierno del Estado aclaró que no pagará las becas de 2024 que exige la sección 34 del SNTE, pero sí negociará del 2025.
ZACATECAS.– El Gobierno del Estado aclaró que no pagará las becas de 2024 que exige la sección 34 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), pero sí negociará del 2025.
El secretario general de Gobierno, Rodrigo Reyes Mugüerza, explicó que no existe un registro contractual ni un presupuesto asignado para ese concepto.
Sin embargo, reiteró que en la mesa de negociación el Gobierno está dispuesto a negociar la asignación de apoyos para 2025 y ofrecer las becas federales y estatales ya existentes.
Explicó que el pago de becas solicitado por el sindicato no está contemplado en el contrato colectivo de los docentes.
“En 2024, no existe ni ha existido la obligación de pagar becas. Si el sindicato cree que sí, que nos muestren en qué parte del contrato colectivo está establecido”, afirmó.
Ante la exigencia del SNTE para el pago de becas atrasadas, el secretario aseguró que el Gobierno no puede disponer de recursos para cubrir un ejercicio fiscal anterior.
“Si el sindicato considera que este pago es obligatorio, pueden recurrir a las instancias legales correspondientes, pero la realidad es que el presupuesto ya fue ejercido y no hay manera de modificarlo”, puntualizó.
El paro que mantiene el sindicato afectó hoy a más del 80% de las escuelas afiliadas, así como a diversas oficinas gubernamentales, entre ellas la Secretaría de Finanzas y Ciudad Administrativa.
El secretario de Gobierno lamentó la afectación a los estudiantes y llamó a los docentes a reconsiderar su postura.
“Las niñas, niños y jóvenes tienen derecho a la educación, y un paro no es la forma de resolver este conflicto. Lo que podemos hacer es sentarnos a dialogar”, enfatizó.
Reyes Mugüerza también informó que este martes a las 10:00 horas se instaló una mesa de negociación con la dirigencia sindical para discutir el tema de las becas del próximo año.
Insistió en que el gobierno mantiene la apertura al diálogo, pero dentro de los márgenes legales y presupuestarios.