

“La salud en Zacatecas vive un caos. Con la transición, todo empeoró. No hay seriedad, no hay soluciones y no hay insumos. Con ocurrencias no se puede gobernar la salud”, sentenció.
ZACATECAS.- La secretaria general de la Sección 39 del Sindicato Nacional de Trabajadores de Salud, Norma Castorena Berrelleza, confirmó que mantendrán tomadas las oficinas del IMSS-Bienestar en Zacatecas y el bloqueo parcial de la avenida Pedro Coronel, al advertir que la transición al nuevo modelo federal “ha sido un fracaso”, sin avances reales y sin autoridades que respondan ante el deterioro del sistema estatal de salud.
Castorena explicó que, desde el inicio del proceso de transferencia al IMSS-Bienestar, las promesas de estabilidad laboral, abastecimiento de insumos y respeto a los derechos adquiridos “no se han cumplido ni mínimamente”. Afirmó que los hospitales y centros de salud operan con desabasto de medicamentos, fallas graves en alimentación de pacientes, carencia de materiales básicos como papel, fallos de equipo médico y problemas estructurales que no reciben atención.
Ejemplificó que en el Hospital de la Mujer las calderas podrían colapsar, en el Hospital General falla la autoclave y en centros de salud “ni siquiera hay recursos para sustituir cinco mosaicos”. Añadió que los trabajadores reportan estrés extremo, hostigamiento y violaciones a sus condiciones laborales, como retrasos en estímulos, prima vacacional y prestaciones estatales que el propio Gobierno de Zacatecas reconoce tener dificultades para cubrir.
La líder sindical acusó que el IMSS-Bienestar opera con opacidad, improvisación y desorden administrativo, al cambiar constantemente a sus responsables nacionales y estatales y permitir que avales ciudadanos interfieran en funciones laborales sin facultades. Aseguró que la coordinación estatal, encabezada por Carlos Hernández Magallanes, no mantiene comunicación con el sindicato ni ofrece soluciones.
Si bien reconoció la atención del Gobierno estatal para destrabar dos prestaciones, aclaró que “solo representan el 1.5%” del pliego de demandas. El punto central pendiente es la continuidad del Programa Estatal de Profesionalización de Enfermería y Trabajo Social, que requiere una mesa nacional con Hacienda para garantizar su financiamiento.
Castorena advirtió que no liberarán las instalaciones del IMSS-Bienestar hasta que todos los acuerdos estén firmados y garantizados, pues “no podemos permitir una transición donde los derechos de los trabajadores no estén asegurados”. Además, anunció que en los próximos días decidirán nuevas acciones, entre ellas una marcha estatal y brazos caídos en diversas unidades.
“La salud en Zacatecas vive un caos. Con la transición, todo empeoró. No hay seriedad, no hay soluciones y no hay insumos. Con ocurrencias no se puede gobernar la salud”, sentenció.