En “semáforo rojo” ocupación de camas en el ISSSTE

Foto: Archivo
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En terapia intensiva están al 83 por ciento.

ZACATECAS.- En terapia intensiva el Instituto Mexicano de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) tiene una ocupación de camas del 83% considerada en “semáforo rojo”; en el IMSS se tiene una ocupación en terapia intensiva del 41 por ciento; mientras que en la UNEME Covid se tiene una ocupación del 36%, informó Gerardo López Longoria, Vocero de la Secretaría de Salud de Zacatecas (SSZ).

Detalló que en el caso de cama general hay parámetros “aceptables”; en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) existe un 28% de ocupación; 16% en IMSS Bienestar.

El funcionario estatal consideró que la demanda de camas hospitalarias por pacientes de Covid-19 ha disminuido y al momento, en el estado hay un 36% de ocupación en cama general y un 35% en terapia intensiva.

Línea de batalla

Los médicos que están en la primera línea de batalla coinciden en que actualmente existe una disponibilidad en camas a diferencia del mes de noviembre; sin embargo en algunos centros hospitalarios hacen falta insumos y personal especializado para atender a los pacientes graves.

Luchando contra el virus y carencias

Erik Díaz es un médico urgenciólogo que labora en el IMSS, ISSSTE y en la UNEME Covid, HOY atraviesa por una reinfección de Covid-19 e incluso, estuvo varios días hospitalizado, sintió que ya no podría vencer al virus.

En agosto se contagió por primera vez y después de un cuadro respiratorio complicado logró salir adelante, no obstante el 15 de diciembre volvió a contagiarse, esta vez su estado de salud empeoró y debe usar tanque de oxigeno.

Consideró que los médicos que están en la primera línea de batalla se encuentran agotados física y mentalmente, varios ya presentan el “síndrome de Bornout”, relacionado a un estrés crónico provocado por exigencias agobiantes o insatisfacción laboral.

Comentó que en las tres instituciones de salud hacen falta especialistas, y aunque no habló de una falta de insumos, reconoció que existe una sobredemanda de insumos.

Ejemplificó que algunos pacientes necesitan estar sedados y ocupan de 10 a 20 ámpulas para atenderlos; el problema radica en que cada vez son más los pacientes que llegan en estado grave, por lo que el medicamento debe distribuirse entre los que ocupan de ellos.

Sin insumos

Por su parte, el doctor Hernán Vázquez es un médico general que trabaja en el IMSS y en una clínica privada; menciona que en noviembre se llegó a un pico en cuanto a las camas ocupadas, mes en que varios de sus compañeros, incluido él, salieron positivos a Covid-19.

“Si nos molestó que en este tiempo las autoridades dijeran que había disponibilidad de camas cuando estaba saturándose, actualmente hemos visto una disminución en el IMSS, además ya se hicieron contrataciones y se aligera el trabajo, pero el riesgo siempre está”, dijo.

Sin embargo, considera que el problema más grande al que se enfrenta el personal es a la falta de suministros y medicamentos para atender a los pacientes, principalmente a aquellos que llegan a la sala de urgencias.

Explicó que desde antes de la pandemia es bien sabido que en el IMSS hacen falta insumos, pero esta realidad se ha replicado en las clínicas privadas, principalmente en medicamentos para atender a pacientes críticos de Covid-19.

Esto lo atribuyó a la alta demanda que existe en el país y la escasa producción de medicamentos, aunado a los retrasos en la distribución.

Piden empatía

Finalmente, los médicos solicitaron empatía por parte de la ciudadanía, y, aunque hay camas disponibles, el personal es reducido y la atención se tiene que dividir entre los demás pacientes.

“Si tengo un paciente con gusto lo atenderé, pero me llegan cinco o diez y debo atenderlos también a ellos, no será la misma atención y no podemos con todos”, reconoció el médico Erik Díaz.