
Durante Semana Santa, los cristianos conmemoran la Pasión de Cristo, se representa su muerte y resurrección. | Foto: Cortesía.
En general, la tradición de los huevos de Pascua es bastante típica en todas partes de Europa.
Durante Semana Santa, los cristianos conmemoran la Pasión de Cristo, se representa su muerte y resurrección, y también se celebran su entrada a Jerusalén y la Última Cena.
En el Concilio de Nicea se establecieron tres puntos fundamentales para celebrar la Semana Santa;
Desde entonces y anualmente, se realizan distintos rituales durante esta festividad en todas partes del mundo.
En España se caracteriza porque es una festividad muy popular. La celebración de procesiones por parte de las típicas cofradías lleva a la gente a salir de sus casas y pasar las tardes viendo su marcha.
Las ciudades más recomendables donde pasar la Semana Santa son Sevilla, Málaga, Murcia, Toledo, Montserrat, Cáceres, entre otros puntos del país.
Estas fechas son muy representativas en este país de los Andes. Las celebraciones en Ayacucho son de las más importantes del continente americano.
Todo comienza con la procesión del Señor de la Agonía y acaba con el Domingo de Resurrección. Donde llevan al Cristo iluminado por velas, al sonido de los cánticos de la gente y al ritmo de los bailes populares.
El Viernes Santo lo celebran desayunando Hot Cruss Buns, un tipo de panecillo o bollito que lleva una cruz para recordar la Cruz de Jesucristo.
El Domingo de Resurrección aprovechan para tomar todos los alimentos prohibidos durante la Cuaresma y, además, se regalan huevos de Pascua como en Cataluña.
Como curiosidad, el lunes terminan la Semana Santa con la Egg Roll Race, que consiste en hacer rodar huevos decorados cuesta abajo en una colina. El primero que llegue a la meta gana.
Los huevos de Pascua también tienen mucha relevancia en el país vecino, aunque ellos solo celebran el Lunes de Pascua.
Desde el Jueves al Sábado Santo, las campanas de las iglesias (que deben sonar para invitar a los fieles a acudir) dejan de sonar hasta el día de la Resurrección.
Los huevos y otros chocolates se esperecen en los jardines de toda Francia para que los niños los busquen.
En Florencia se celebra ‘Scoppio del Carro’: se arrastra un carro con bueyes blancos desde la plazuela del Prato hasta la Catedral.
Lo que llaman una paloma (una mecha que emula al animal en color y forma) enciende los fuegos artificiales que se encuentran en el carro.
Filipinas es el país asiático con mayor número de católicos y su Semana Santa es la más sangrienta del mundo.
En la provincia de Pampanga, al norte de Manila, devotos de todas las edades caminan descalzos por las calles durante kilómetros hasta la histórica Catedral de San Fernando, construida a mediados del siglo XVIII durante la época de la colonización española.
Celbran el ‘Locsolkodás’, que tiene lugar el Lunes de Pascua. Ese día, los hombres tienen que lanzar agua a las mujeres, una tradición que proviene en realidad de un antiguo rito de fertilidad anterior al propio cristianismo, pero se ha adaptado.
Aún más rara es la tradición de República Checa, donde en ‘Pomlázka’ los achicos azotan a las chicas con unas ramitas de sauce de colores, lo que también, se supone, traerá fertilidad y salud.
El Domingo de Ramos se celebra una procesión que va desde el Monte de los Olivos hasta la zona antigua de la ciudad.
El Jueves Santo, a partir de las 9 de la moche, peregrinos y cristianos locales velan durante una hora de meditación en el Huerto de Getsemaní.