
Oración para tener paz en mi hogar | Foto: Cortesía
La oración puede ser una práctica que ayude a mantener a la familia unida, una muestra para nuestro señor Jesucristo de que lo necesitamos en nuestras vidas.
La familia es lo más importante que tenemos, por ello debemos cuidarla y mantener una relación de amor y unidad con todos. Esto no es nada fácil, ya que todos tenemos diferente personalidad y pueden chocar en más de una ocasión.
La paz y tranquilidad en el hogar es clave para poder sobrellevar las situaciones complicadas que se puedan vivir en el mundo. Estamos cada vez en un mundo más acelerado y complejo por ello se debe de hacer todo el esfuerzo posible por mantener un ambiente armonioso y de amor.
La oración puede ser una práctica que ayude a mantener a la familia unida.
Porque Tú eres paz, porque Tu eres tranquilidad, porque Tu eres todo lo que busco, te pido amado Jesús que te despliegues con todo tu amor y poder sobre mi hogar que tanto te necesita.
Señor, cubre a cada uno de los miembros de mi familia, nuestra casa y el hogar que conformamos con la paz y armonía que provienen de Ti.
Desarmando nuestros corazones a veces cargados de desamor, egoísmo e intolerancia.
Aflorando en nosotros lo mejor de cada uno, para que nuestra convivencia sea verdaderamente agradable para todos.
Precioso Señor Jesucristo, te pido que alejes de nuestro hogar a todas las personas que de una u otra forma han contribuido a que perdamos la tranquilidad.
Te pido que actúes sobre nosotros, derrotando todos los sentimientos que nos han separado y nos han hecho tanto daño.
Ayúdanos a perdonarnos de corazón, a poner por encima de otras cosas a nuestra familia, para que podamos salir adelante juntos y vivir en paz.
Quítanos la venda que no nos deja ver a veces el mal que nos hacemos a nosotros mismos y a las personas que amamos con nuestras acciones, palabras ofensivas u omisiones.
Que abunde la paz y tranquilidad en nuestro hogar Señor, te lo pedimos de corazón.
Que la luz del perdón y el amor brillen en nuestra familia y aprendamos a vivir de tu mano, sin hacernos daño, sin ofendernos ni maltratarnos.
Porque todo es posible a través de Ti mi Señor Jesucristo; hoy te entrego mi hogar, para que Tú lo sanes desde sus entrañas; para que no quede ninguna sombra de odio que nos siga atormentando.
Para que volvamos a recobrar la esperanza en la familia que un día decidimos formar; y gracias a tu presencia en ella, todas las cosas vuelvan a estar llenas de amor y unión.
Una vez más, te pido Señor Jesús, que destruyas toda fuerza de desamor que quiera entrar en nuestro hogar y quitarnos la tranquilidad y la familia por la que tanto hemos luchado.
¡Bendito seas Señor, por escuchar nuestras súplicas!
Amén.