

La Virgen de Guadalupe: 10 datos que probablemente no sabías sobre su aparición | Foto: Cortesía
Un recorrido por hechos históricos, curiosidades y elementos poco difundidos sobre el acontecimiento que marcó la fe de millones de mexicanos.
Cada 12 de diciembre, millones de personas celebran a la Virgen de Guadalupe, una figura que ha marcado la identidad espiritual, cultural e histórica de México. Aunque su historia es ampliamente conocida, existen detalles menos difundidos que revelan la profundidad del simbolismo y el impacto de su aparición en 1531.
Aquí te presentamos 10 datos que probablemente no sabías:
Del 9 al 12 de diciembre de 1531, Juan Diego aseguró haber visto a la Virgen en el cerro del Tepeyac. Todo sucedió en un lapso sorprendentemente corto.

Estudios sugieren que las estrellas bordadas en la tilma coinciden con la posición de las constelaciones visibles en el cielo la madrugada de la última aparición.

La Virgen aparece con características que combinan herencia indígena y española, lo que ayudó a unir espiritualmente a dos culturas en conflicto tras la Conquista.

Algunas investigaciones indican que la palabra que Juan Diego escuchó pudo ser “Coatlaxopeuh” (se pronuncia “cuatlasupe”), que significa “la que aplasta a la serpiente”. Los españoles lo interpretaron como “Guadalupe”.
El ayate de maguey tiene una vida útil aproximada de 20 a 30 años. Sin embargo, la prenda donde está plasmada la imagen se ha mantenido en pie durante casi medio milenio.

Investigadores afirman que, al aumentar la imagen, se observan reflejos similares a los de un ojo humano: una figura que representa a Juan Diego y otras más que parecen corresponder a testigos del momento en que el manto fue abierto ante Zumárraga.

El manto muestra a la Virgen sin estar apoyada en la luna o el ángel; el efecto visual indica que no está en contacto con el suelo, un símbolo de divinidad.

La figura de cuatro pétalos, ubicada en el vientre, es un antiguo símbolo náhuatl que representa el centro del universo. Para muchos especialistas, es un mensaje directo para los pueblos indígenas.

Exámenes científicos no han logrado identificar con precisión los materiales utilizados en la imagen. No corresponde a ninguna técnica conocida del siglo XVI.
Cada año recibe más de 20 millones de peregrinos, especialmente durante el 12 de diciembre.
