Monte Escobedo, trofeo de la naturaleza

Aunque no se sabe a ciencia cierta cuándo ocurrió la fundación de Monte Escobedo, se estima que fue en 1620, ya que un grupo de españoles llegó el 15 de octubre a lo que sería la Hacienda de Santa Teresa, distante a cuatro leguas y que fue propiedad, como casi todo el municipio, de la … Leer más

Aunque no se sabe a ciencia cierta cuándo ocurrió la fundación de Monte Escobedo, se estima que fue en 1620, ya que un grupo de españoles llegó el 15 de octubre a lo que sería la Hacienda de Santa Teresa, distante a cuatro leguas y que fue propiedad, como casi todo el municipio, de la familia Escobedo, procedente de Chihuahua.

Originalmente, este sitio fue llamado San Andrés del Astillero.

Los primeros pobladores indígenas dejaron como hallazgo de su ocupación las murallas de piedra, así como los cimientos de construcciones rudimentarias que existen todavía en la cuesta de Caballerías, en El Peñol, Las Mesitas y varios sitios más, donde además se encuentran ollas, metates y puntas de flecha.

Se cree que fueron los huachichiles, antecedentes de los huicholes, que en su peregrinar del norte de México ocuparon este territorio.

Esta teoría se basa en que todavía los huicholes utilizan nuestro municipio para ir a la región de Real de Catorce, San Luis Potosí, en busca del milenario peyote que utilizan en sus ceremonias religiosas.

Durante ese mismo año, las Cortes de Cádiz aprobaron una constitución para la Nueva España y reconocieron al lugar, nombrándolo Monte Escobedo, en honor a la familia latifundista.

No fue sino hasta 1917 cuando el Congreso del Estado reconoció la soberanía del municipio.

En 1830, el gobernador Francisco García Salinas, con autorización de la Legislatura, compró la Hacienda de Santa Teresa a fin de que ese lugar fuera la cabecera del municipio, además de que ese lugar tenía un río, así que las autoridades municipales se trasladaron a ese lugar.

Sin embargo, cuando terminó su periodo, en 1834, el proyecto se vino abajo.

Durante la Revolución Mexicana, no hubo batallas de consideración en Monte Escobedo, pero en 1916 el pueblo fue ocupado por fuerzas carrancistas al mando del general Francisco De Santiago.

Al saber que llegarían tropas de la División del Norte, se atrincheraron en la Hacienda de Santa Teresa, donde fueron derrotados por los carrancistas tras cuatro días de lucha.

El sistema montañoso de Monte Escobedo es uno de los más accidentados de la entidad,  por ello se origina en medio de las serranías, valles, cañadas y desfiladeros, con formas caprichosas  como la barranca de San Pedro que semeja a una catedral.

Visita obligada


Una imponente cascada es llamada El salto de la Santa Cruz, con una caída de agua de más de 35 metros en tiempo de aguas. Dista 45 minutos de la cabecera municipal. Es una de las bellezas naturales de Monte Escobedo digna de admirar. (Cortesía de Luis Barragán)

Conoce el Museo arqueológico de la comunidad San Pablo, donde además de conocer los testigos de la historia, se disfruta de un paisaje hermoso, profundas, barrancas que sus acantilados semejan figuras caprichosas como una catedral. Dista una hora a la cabecera municipal.

La Laguna de Gamboa se encuentra al sur de la población. Es de los sitios preferidos para ir de paseo, especialmente si se trata de excursiones escolares. Además de su tranquilidad, ofrece un ambiente para disfrutar sin prisa.


El Chinacate es un lugar propio para paseos en la sierra. Desde su cumbre se ve el cañón de Mezquitic y al sur, el imponente Cerro de la Leona, en el mineral de Bolaños, Jalisco. (Cortesía de Luis Barragán)


La Ermita de Guadalupe está al poniente de la población en un pintoresco cerrito rodeado de peñascos y robles. Es una hermosa capillita dedicada a la Virgen de Guadalupe. (Cortesía de Luis Barragán)
 

Ubicación


 

Platillos típicos

Barbacoa: Este es el platillo que no falta en los festejos como bodas y 15 años. La carne puede ser de carnero o de res; se adoba con chile y especias. Se puede hacer en un hoyo en la tierra, en tambos o vaporeras.

Queso: Este producto se elabora casi en todas las rancherías del municipio; tiene fama de ser muy bueno. Se cuaja la leche, se le quita el suero y se muele con poca sal. 

Atole de maíz: Esta bebida, aunque no tiene sabor, es excelente para acompañar el menudo, pozole y guisos picantes.


 

La leyenda

La voluntad de la virgen
Esta leyenda que tantas veces arrullara los sueños infantiles de nuestros antepasados, narra la aparición de la Purísima Concepción.

Luego de visitar sus aserraderos en San Andrés del Monte, ciertas razones hicieron que el dueño de la Hacienda de Santa Teresa no pudiera regresar, así que tuvo que pernoctar en casa de su mayordomo, en San Andrés.

Ahí se presentaron unos inditos para llevarle como presente una imagen de la Purísima Concepción.

El señor quedó sumamente complacido y quiso recompensarlos, pero en vano los buscó.

La imagen fue llevada a la Hacienda de Santa Teresa, a donde tiempo después llegaron visitantes de Juanchorrey.

El dueño los invitó a la sala para mostrarles la preciosa prenda que le habían regalado, pero al entrar, no estaba la imagen.

Al siguiente día, el montero de San Andrés le informó que la imagen estaba al pie de un árbol frondoso en el lugar que hoy ocupa el antiguo templo parroquial.

El amo se regocijó por el hallazgo y ordenó a su sirviente que la trajera a su casa.

Para su sorpresa, al día siguiente la Purísima Concepción amaneció en el mismo sitio, por lo que el hacendado comprendió que su voluntad era residir en el Monte y le mandó edificar un pequeño oratorio.
 

Edificios históricos

Templo de San Antonio
Comenzó a construirse en 1897. Está en lo que se conocía como Barrio de Arriba, ahora San Antonio. La plaza adjunta es sede de eventos culturales.


Casa de la calle Parroquia
A fines del siglo 19 y principios del 20 se usa como casa cural. Tiene cuatro corredores de arquería con piezas alrededor. Fue construida por el albañil Huerta, de Colotlán, Jalisco, padre del que sería Presidencia de la Republica, Victoriano Huerta, quien siendo niño trabajó auxiliando a su padre en estas labores. (Cortesía de Luis Barragán)


Nuevo templo parroquial
Es el mayor y más bello edificio del municipio. Construido ininterrumpidamente de 1878 al 1897, el recinto está formado por siete bóvedas y la del coro con sus respectivos arcos sostenidos por pilastras de sillería. Tiene una cúpula sostenida por 48 columnas de cantera formando un cilindro cerrado en la parte superior por media naranja, coronada por una cruz de hierro. (Cortesía de Luis Barragán)


Casa Robles
Al lado norte del Jardín Zaragoza se encuentra este edificio construido en 1860 por Juan Aldaco, avecinado en Monte  Escobedo por haberse casado con Concepción Ortega, de este lugar. Tiene un frente gótico jerezano con balcón corrido. Esta casa ha tenido muchos dueños, siendo la última venta en 2011, en que Jesús del Real la compra en favor del municipio. (Miguel Correa)

Ciudadanos Ilustres

Félix Bañuelos (1878-1948): Pese a haber nacido en El Vallecito, Jalisco, vive su niñez y juventud en Pastoría, de Monte Escobedo, de donde era su padre Rodrigo Bañuelos. En 1911 se une a la Revolución con Luis Moya. Participa activamente en la Toma de Zacatecas. En 1937 fue electo gobernador de Zacatecas. Muere en la Ciudad de México en 1948.

Santos Bañuelos (1882-1916): Nace en Pastoría, Monte Escobedo. En su juventud se dedica al comercio de ganado, caballar y al encontrarse en Jerez en sus negocios, se dio cuenta de los sucesos del 20 de noviembre de 1910. Se solidariza con la causa y para el 6 de marzo de 1911 ya tenía un contingente por la sierra de Jerez, Valparaíso y Monte Escobedo. Muere asesinado en Ciénega Grande, Jalisco.

Juan Reyes Antuna (1888-?): Poeta regional que escribe sobre lo que ama, por lo que muchos de sus versos expresan la belleza de su patria chica, sus serranías, valles y los lagos que en temporada de lluvias semejan espejos tirados al azar entre el follaje de sus bosques. Es autor del libro Versos, más de 100 poemas que infunden hondo sentimiento regional a los que como él, nacimos en este pedazo de suelo zacatecano. Ve la luz primera el 26 de diciembre en Monte Escobedo. 

Miguel Palacios: Originario de Hacienda Santa Teresa, Monte Escobedo, se da alta en la Guardia Nacional de Zacatecas en marzo de 1857. Lucha a lado de Jesús González Ortega, durante la guerra de tres años participó en todos los combates que libraron los defensores de la Reforma. Terminando el sitio de Querétaro, el Gobierno de la Republica, dada su honradez, confía su lealtad a la custodia del archiduque Fernando Maximiliano.

Festividades


La Purísima Concepción es la protectora de Monte Escobedo. (Cortesía de Luis Barragán)

La Purísima Concepción es la santa patrona del municipio, por lo que la celebración en su honor es de las más importantes.

Del 30 de noviembre al 8 de diciembre se lleva a cabo el novenario en su honor. Esta fiesta es religiosa, ya que se ve con recelo que haya festejos profanos.

Fieles devotos llegan a verla en peregrinaciones; se ofician misas y le cantan Las mañanitas.

Por las noches hay representaciones teatrales y el 8 de diciembre se quema el árbol de pólvora.

Todos los días del novenario las peregrinaciones son acompañadas por las danzas del municipio, regularmente el día 7 nos acompaña la Banda Sinfónica del Estado en la recepción de la imagen peregrina.

Monte Escobedo se viste de fiesta al llegar mayo, ya que se lleva a cabo la Feria de Primavera, que inicia con la coronación de la reina y sus princesas.

Durante la primera semana del mes se realizan exposiciones como la ganadera, de pintura, elaboración de queso, así como diferentes competencias deportivas, rodeos, charreadas, carreras de caballos.

El día 5 hay un gran desfile cívico para conmemorar la Batalla de Puebla; participan todas las escuelas, el sindicato de músicos y la asociación de charros.

En el transcurso de la semana, el Teatro del Pueblo tiene presentaciones de grupos musicales y folclóricos.

El personaje

Manuel Sánchez Vázquez: Nació el 18 de mayo de 1903 en Monte Escobedo. Aprendió sus primeras letras en la escuela del lugar.

Desde su juventud demostró gran afición a las artesanías; elaboraba objetos pirotécnicos, construía grandes globos aerostáticos que elevaba por los aires y también fue alfarero.

Se casó en 1930 con Angelina Jiménez, con quien tuvo 11 hijos. Algunos murieron a temprana edad, quizá por ello comenzó su afición por la medicina, demostrando su gran generosidad para con sus semejantes sin interés económico, virtud que demostró a lo largo de su vida.

Consiguió algunos libros de homeopatía y sintomatología y asistió a la ciudad de Zacatecas a actualizarse, recibiendo su diploma como médico práctico homeópata.

Algunos años después de haber enviudado, se casó con María Guadalupe Rentería.

En 2001, el ayuntamiento le rindió un homenaje erigiéndole un busto en un pequeño jardín dedicado a su memoria.

El 15 de febrero de 1985 dejó de existir, dejando ejemplo de generosidad, ya que nunca vio en la medicina una forma de lucro, tan solo se llevó la satisfacción del deber cumplido.

Imagen Zacatecas – Luis Alfonso Barragán Robles