?Desalojan a posesionarios del rancho Los Rosales

GUADALUPE.- Policías municipales tuvieron violento encuentro con particulares, e integrantes del Barzón, cuando éstos se opusieron al desalojo de tierras de cultivo, de nueve hectáreas de riego, que según actuales posesionarios, cada hectárea alcanza un costo de dos millones de pesos. El rancho agrícola conocido como Los Rosales, fue invadido la mañana de este miércoles … Leer más

GUADALUPE.- Policías municipales tuvieron violento encuentro con particulares, e integrantes del Barzón, cuando éstos se opusieron al desalojo de tierras de cultivo, de nueve hectáreas de riego, que según actuales posesionarios, cada hectárea alcanza un costo de dos millones de pesos.

El rancho agrícola conocido como Los Rosales, fue invadido la mañana de este miércoles por policías municipales y personal de una empresa de grúas para desalojar a la familia Rosales, quienes manifiestan estar en posesión del rancho desde los años sesentas, ya van tres generaciones de Rosales, en el mismo suelo.

Entre empujones, aventones, tirones, e insultos, una mujer perdió el sentido, y por lo menos dos personas fueron arrastradas por los policías, ya que los civiles se oponían a que los de las grúas engancharan tractores y otros implementos agrícolas.
 
Mientras que policías y civiles se insultaban y los uniformados intentaban quitar a los rancheros para que las grúas movieran las maquinarias, José Luis Belmontes, líder Estatal del Barzón Popular, arengaba a los Rosales y a su gente para que impidieran colocar las cadenas de las grúas, lo que desencadeno en violencia de parte de los policías, que jalonearon y levantaron en vilo a un hombre y a una mujer, que a la postre ésta perdió el conocimiento.
 
Una ambulancia de Protección Civil estatal acudió al lugar para dar atención médica a la mujer desmayada, luego que las aguas se calmaron, de repente otra señora perdió el sentido y cayó al suelo, dos señoras más, entre los empujones se quedaron sin calzado, por el lodazal donde andaban. 
 

Imagen Zacatecas – Pedro Luna