Whatsapp

El servicio de mensajería instantánea se ha convertido en la primera herramienta más usada por ser comunicación en tiempo real, se genera entre dos o más personas, comunicación basada en texto que ha suplido el lenguaje verbal.

Según el autor Sergio Octavio Contreras Padilla basado en su libro: “Zacatecas y la sociedad internet”, señala que la generación Y (nacidos entre 1977 y 1990) también conocida como la generación NET, abarca el 30% de los usuarios de la red y la generación X (nacidos entre 1965 y 1976) representa el 23% de usuarios. Ambas generaciones son los mayores consumidores de chat y correo electrónico.

Con los datos anteriormente expuestos, nos podemos dar una idea del uso y destino que se le brinda en tiempo a esta importante red social y de la delicadeza del mismo al usufructo que se le brinda, por medio de este tipo de mensajería demostramos de forma virtual alegría, enojo, sorpresa, angustia a través de emojis que “nos representan”, y no solo eso, compartimos contactos, ubicación, documentos, fotografías de todo tipo, familiares, de trabajo, algunas con contenido sexual e incluso, a través del famoso “pantallazo” o “screenshot” podemos compartir de forma inmediata la conversación “privada” que hemos tenido con otra persona por medio de la misma herramienta.

Considero que no hemos logrado dimensionar más allá de la utilidad, la peligrosidad del Whatsapp, que por un lado nos conecta de forma inmediata con personas de cualquier parte del mundo pero también en su mayoría, disminuye considerablemente la frecuencia y la calidad de conexión y de inter-comunicación que tenemos con las personas que tenemos cerca de forma física. A esa peligrosidad me refiero.

Ahora bien, no se trata de señalar únicamente lo delicado y arriesgado, como en todo, hay claros oscuros que se deben tomar en cuenta, sin embargo, hay que reconocer que si hay un sistema resolutivo de forma inmediata es Whatsapp, gracias a eso, hasta la propia bolsa de valores ha logrado incrementar sus activos, así también gracias a este tipo de mensajería se ha logrado detectar la ubicación de delincuentes de forma inmediata y en tiempo real y se han logrado rescatar a las víctimas y gracias a ello también, se han podido conocer y difundir diversos actos de corrupción dentro y fuera de los gobiernos y ha sido posible que la sociedad conozca a través de sus reenvíos este tipo de delitos que nos afectan a todos como sociedad.

Sin saberlo, nos hemos convertido como sociedad en un cúmulo de internautas donde pasamos la mayor parte del tiempo inmersos por la frecuencia que pasamos ahí y que como bien se sabe, la frecuencia genera hábito. ¿Cada cuándo utilizas Whatsapp?.

A la luz de un año electoral que se avecina, Whatsapp genera ya agenda en el sentido de que es a través del reenvío de información sobre casas encuestadoras, opiniones de líderes políticos, videos sobre los posibles aspirantes, conversaciones sobre las tendencias de los mismos, sin duda alguna es ya una herramienta primordial para poder definir a través de una cercanía inmediata con el electorado quién será un sucesor o sucesora. Es nuestro deber hacer uso de ello con responsabilidad cívica.

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