Que no se te seque el alma

Como humanos al pasar el tiempo estando dentro de un matrimonio, dentro de una relación o de tener un mismo trabajo, es muy fácil caer en la rutina. Dentro de una relación es muy difícil estar siempre de buenas, es muy difícil dar amor diario; dentro de la oficina es muy difícil dar el máximo … Leer más

Como humanos al pasar el tiempo estando dentro de un matrimonio, dentro de una relación o de tener un mismo trabajo, es muy fácil caer en la rutina.

Dentro de una relación es muy difícil estar siempre de buenas, es muy difícil dar amor diario; dentro de la oficina es muy difícil dar el máximo rendimiento sobre todo si estás desmotivado por el sueldo o por que crees que debes tener un mejor puesto.

Reflexionando a través de la propia experiencia y de analizar diversas situaciones de la vida, me he dado cuenta de que la rutina y la obligación pueden causar en la persona cansancio, depresión y desmotivación.

En un curso que tome nos hablaban de esto y la solución que nos dieron fue: Hacer las cosas por y con amor por que si las haces por obligación o por rutina, el alma se seca.

Si estás pasando por esa época en tu vida, en tu relación de pareja, en tu relación con tus hijos o hasta con tus padres, en tu vida de trabajo, en tu oficina; o en tu trabajo dentro de la casa, has la lucha, solo se vive una vez, métele amor a las diversas situaciones de tu vida.

Si eres ama de casa y ya te aburrió hacer el quehacer, piensa en el amor que le tienes a tu familia y que éste sea tu motivación para hacer las cosas, si lavas hazlo con amor, si planchas  hazlo con amor, si cocinas métele amor, vas a ver que disfrutas hacerlo y que tu humor mejora muchísimo.

Si estás en la oficina y tu trabajo es rutinario o tedioso, piensa que lo estas haciendo por amor a tu familia y que ese amor sea el que te motive a hacer las cosas y que te haga que tu alma vibre.

Intenta hacerlo un momento hoy, vele aumentando hasta que todo tu día lo hagas con amor. Para eso es recomendable estar consiente del presente que estás viviendo, echándole todas las ganas, sin pensar en otra cosa más que en el amor con que lo  estas haciendo ya sea barriendo, cocinando, lavando los trastes o haciendo tu trabajo en la oficina.

Que por ti no quede, sé fuerte y lucha, que te quede la satisfacción de que tú sí le echaste ganas a la vida, que le echaste ganas a tu familia, ganas a tu matrimonio, ganas a tu trabajo de oficina, como obrero, campesino, albañil, etcétera.

Tú ganas y todos ganan, si no haces las cosas con amor se crea una cadena interminable en donde si yo no doy amor el otro no me da y así sucesivamente, llegando a un tiempo de sequedad en el ambiente pero sobre todo sequedad en el alma de todos.

Si tu vida hasta ahorita ha sido  medio triste metele amor, es lo que te esta faltando, no tengas una alma seca que te hace deprimirte, dale alegría a tu alma.

Si te es muy difícil empezar pídele a Dios que te ayude, pídele que te de fuerzas para hacer las cosas con amor, no desfallezcas, ten confianza y vas a ver que buenos resultados vas a tener.




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