¡Sé altruista para mejorar!
Pertenecemos a este mundo y cada uno de nosotros tiene la oportunidad de ayudar a otros.
El coraje del altruismo es necesario en la bondad hacia los demás. Estar enjaulado para ti mismo, contigo mismo, trae miedo y ansiedad. Sigue una sensación de ansiedad, una sensación de incomodidad en un cuerpo vulnerable a incidentes de salud. El miedo se contiene, el estrés interno disminuye, con efectos positivos sobre la presión arterial: se establece un bienestar general.
Recientemente escuché a un científico de Nueva York, que es médico también e informó que las personas que usan el pronombre “Yo” sufren frecuentemente de ataques cardíacos. No hizo su punto, pero me parece que el uso excesivo de “yo” centra a la persona en sí misma y así limita sus perspectivas. Ella se dobla por dentro. Situación improbable para un corazón sano. Pero, la empatía por los demás es esencial. Esto proporciona una mente abierta que cambia completamente nuestras perspectivas. Si yo fuera médico, probablemente le recetaría a mis pacientes: “¡Sé altruista para mejorar! ”
Pertenecemos a este mundo y cada uno de nosotros tiene la oportunidad de ayudar a otros. Solicitar a aquellos que comparten tu vida laboral tendrá consecuencias. Porque si son sólo diez de ellos, la atmósfera general será más agradable con menos disensión. Supongamos que a su vez actúan en concierto con sus parejas. Los efectos serán progresivos, pero eventualmente tendrán acción transformadora. Así es como se cambia el mundo.
Hoy necesitamos cultivar la conciencia de la unidad de la humanidad y trabajar juntos para hacer frente a los retos que nos afectan a todos, en todos los sentidos y niveles. Los científicos llevan tiempo advirtiendo de la crisis climática, como lo que hoy estamos viviendo y no podemos limitarnos a explotar este planeta y su entorno natural, debemos cuidarlos. Las personas toman diferentes caminos en busca de realización y felicidad.
El hecho de que no estén en tu camino no significa que se hayan perdido. Los elefantes pueden tener cerebros más grandes que nosotros, pero los seres humanos somos más inteligentes. Nuestra inteligencia es una cualidad humana distintiva. Durante los últimos miles de años, el mundo ha visto un gran número de maestros y pensadores, quienes han mostrado una maravillosa inteligencia humana. Sin embargo, si esta inteligencia se combina con el odio, la ira y el miedo, puede ser muy destructiva. Por lo tanto, debemos tener cuidado de combinarlo con afecto. Por sí sola, la inteligencia no tendrá mucho impacto en nuestra salud física, pero cuando se combina con la compasión y la calidez de corazón, brinda paz mental y mejora nuestro bienestar físico.
Es muy importante reconocer la naturaleza básica de la humanidad y el valor de nuestras cualidades humanas. Ya sea que seamos educados o sin educación, ricos o pobres, que pertenezcamos a esta nación o a esa nación, a esta religión o a esa religión, a esta ideología o a esa ideología, la diferencia es secundaria y no importa. Cuando volvemos a nuestra humanidad básica, todas las personas son iguales. Entonces podemos verdaderamente decir las palabras hermano, hermana; no son solo palabras bonitas, tienen algún significado. Ese tipo de motivación construye automáticamente la práctica de la bondad. Nos da fuerza interior y eso ayuda a mejorar el altruismo.