Educar y fomentar la tolerancia
Fomentamos la autoestima dado que aprenden a respetarse así mismos y a los demás.
Educar en la tolerancia y en el respeto son de los grandes retos de la humanidad pero también es la llave para el cambio a una sociedad mejor, más justa, más humana y donde la paz y el diálogo pueden estar presentes. Las personas educadas en la tolerancia son menos manipulables, dado que son más sensibles a las necesidades de los demás, y a no faltar el respeto. Favorecen la toma de decisiones propias. Al ser menos manipulables y fomentar su sentido crítico los niños son más capaces de decidir por sí mismos, sin dejar que las opiniones de los demás, o los estereotipos impuestos de afuera los condicionen.
Cuando realmente educamos en tolerancia los niños se vuelven más simpáticos porque son capaces de ponerse en lugar de los demás, de ver que hay diferentes formas de pensar y de actuar pero sobretodo de aprender a respetar las opiniones diferentes, los sentimientos y las emociones de los demás.
Educando en tolerancia y respeto fomentamos la autoestima dado que aprenden a respetarse a sí mismos y a los demás. Respetar a los demás y ser tolerantes con los demás nos lleva al respeto hacia uno mismo y evita que no nos manchemos y fustiguemos por nuestros errores. Educando en el respeto y la tolerancia no sólo enseñamos la cortesía y a dar las gracias, sino que también se fomenta que estén abiertos a conocer a más gente, a no juzgar a las personas diferentes y a respetar que existen otros puntos de vista diferentes con el que ellos crecieron.
La educación actual tiende a centrarse en objetivos materialistas, donde solo se busca la gratificación sensorial y necesitamos que todos los sistemas involucrados en el desarrollo de las nuevas generaciones de jóvenes tengan una felicidad enraizada en el poder de la mente, así serán menos violentos y agresivos. Es menos probable que practiquen o sean víctimas del bullying ya que los estamos formando en la tolerancia, en la diversidad y en el respeto. Serán más sensibles a la diversidad porque implica entender que no todos somos iguales y que no todos tenemos la misma necesidad ni la misma forma de aprender, por lo tanto eso nos llevará a un inclusión y unidad, aparte nos abre la mente a nuevas ideas, nuevas experiencias, expectativas de una realidad posible.
Una persona culta se volverá noble sólo cuando haya puesto en práctica lo aprendido, en lugar de meras palabras. El cambio comienza con cada uno de nosotros a título individual. Si un individuo se vuelve más compasivo influirá en los demás y así es como cambiaremos el mundo, porque cada uno de nosotros anhela una vida feliz.
Nadie trabaja deliberadamente para crear problemas o sufrimientos, cada uno de nosotros actúa con la intención de ser más feliz. Pero, ¿porque nos centramos en nosotros mismos y preocupándonos poco por los demás? Porque actuamos desde una motivación egoísta y nuestras acciones se vuelven poco realistas. Actuamos incorrectamente, y como resultado surgen todo tipo de problemas no deseados, creados solo por nosotros mismos. Por lo tanto, necesitamos una actitud mental sana y adecuada que tenga en cuenta el bienestar de los demás.