Por rencillas, el rastro es un elefante blanco

Foto: Rocío Ramírez
Foto: Rocío Ramírez

El primer edil consideró que la no operación del nuevo rastro es un problema político.

NOCHISTLÁN.- Por diferencias políticas entre el alcalde y los tablajeros el nuevo rastro permanece como elefante blanco, a pesar de estar completamente equipado.

Armando Delgadillo, presidente municipal lamentó que el inmueble permanezca sin uso, a pesar de tener las condiciones ideales para el sacrificio.

Explicó que en un inicio se realizó la matanza en el nuevo espacio, pero los tablajeros no estuvieron de acuerdo y regresaron a las viejas instalaciones, pese a las carencias y observaciones sanitarias que hay en dicho lugar.

El primer edil consideró que la no operación del nuevo rastro es un problema político y, aunque no dio mayores detalles al respecto dijo que trabajará para dar solución al problema y que se aproveche la infraestructura y equipos.

En las nuevas instalaciones existe la capacidad para que se sacrifiquen 210 animales diarios, informó Delgadillo, y el objetivo de tener dicho espacio era precisamente darle mayor valor a la carne para su distribución a nivel nacional e incluso exportarla.

En las nuevas instalaciones se mantiene a personal de intendencia y a veladores para que cuiden y den limpieza al lugar, aunque el sacrificio de animales se realice en los lugares de antaño.

Detalló que anualmente se sacrifican 900 cabezas de ganado al año, solo para el consumo interno del Pueblo Mágico.