Una mujer compra un sillón en 25 dólares y encuentra un tesoro adentro

Mientras estaba sentada en su sillón, se le cayó su celular entre los cojines, al introducir su mano para buscarlo, sintió algo que no era su teléfono

CANADÁ.- Una mujer canadiense compró un sillón en venta de segunda mano por la módica cantidad de 25 dólares hace cuatro años. Hace algunos meses,la afortunada mujer, no imaginaba lo que encontraría en donde había descansado todos estos años.

 

El sueño de muchos, la realidad de pocos

Mientras estaba sentada en su sillón adquirido a bajo costo, se le cayó su celular entre los cojines, al introducir su mano para buscarlo, sintió algo que no era su teléfono. Sacó el objeto el cual era un reloj, pero no cualquier reloj, sino un Rolex Daytona 6241 Paul Newman. Este modelo es antiguo y considerado “raro”, además de ser uno de los más caros y exclusivos de la historia.

No tomó el hallazgo como una recompensa inmediata,sino que primero preguntó a su padre si pertenecía a él, el padre le respondió que no podía permitirse algo así. La mujer decidió buscar al especialista en relojes Paul Altieri, fundador de la firma Bob’s Watches para saber un poco más acerca del reloj encontrado.

El coleccionista de relojes le dijo que el reloj era un modelo de Rolex de lujo fabricado entre 1966 y 1969, del cual habían creado sólo 3 mil piezas y de ellas; un pequeño porcentaje había sido equipado con esferas apodadas “Paul Newman”.

En definitiva el reloj era una rareza entre rarezas.

 

El valor del tesoro perdido en el sillón

Un Rolex de este mismo modelo, fue subastado en 2017 por 15 millones de dólares. Uno de los asesores de la empresa de Bob’s Watches corroboró que reloj encontrado por la mujer era del mismo modelo, el cual evaluó en 250 mil dólares.

Pese a la información que la mujer tenía acerca del valor del reloj, decidió regresar a la tienda donde había adquirido el sillón cuatro años atrás para preguntar por el dueño anterior del sofá al cual pensaba devolverle el reloj. Sin embargo, debido al tiempo que ya había transcurrido no era imposible localizarlo. Parece que su honestidad se vio recompensada por la vida.

La afortunada decidió comprarse una casa con el dinero y hacerse una cirugía estética de aumento de senos.

Después de saber esta historia, ahora vas a buscar bien en tus muebles y sillones ¿cierto?

 

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