Padres encierran en una jaula a su hijo y luego lo asesinan

Foto: Alamy
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Azlin Arujunah y Ridzuan Mega Abdul Rahman, ambos de 27 años, están acusados de asesinar a su hijo con agua hirviendo sobre su hijo

SINGAPUR.-Unos jóvenes padres están acusados de asesinar a su hijo hace tres años. Un tribunal de Singapur mostró como prueba unas fotografías en las que se veía una jaula para animales,en la que supuestamente unos padres mantuvieron a su hijo de cinco años, antes de matarlo.

Azlin Arujunah y Ridzuan Mega Abdul Rahman, ambos de 27 años, están acusados de asesinar a su hijo con agua hirviendo sobre su hijo hace tres años.

 

La tortura hacia el hijo

En la corte mostraron unas fotografías en las que se ve al menor; en estas se aprecian las quemaduras y los cortes en su cuerpo, incluidas las heridas en el rostro y la cabeza.

El niño tenía una fractura en la nariz, así como moretones en todo el cuerpo y cabeza. Sus labios y encías del niño estaban desgarrados, de acuerdo al patólogo forense.

El médico explicó que estas lesiones parecen ser causadas por una caída o un golpe considerablemente fuerte.

La víctima presentaba quemaduras de segundo a tercer grado, las cuales cubrían el 75% de su cuerpo. Tenía lesiones renales agudas, deshidratación, nariz rota, cortes en el rostro. En la parte cognitiva, el niño presentaba un severo retraso en el habla.

Según información de medios, los padres no buscaron atención médica de inmediato, sino que esperaron durante seis horas para llevarlo a que lo atendieran. El niño falleció un día después de ser ingresado al hospital.

 

El juicio contra los padres

Este martes se llevó a cabo el primer día del juicio contra la pareja, en el se mencionó que el niño de cinco años pasó encerrado varias horas en una jaula. Durante su confinamiento, el menor fue torturado con cucharas y pinzas calientes antes de morir.

Un patólogo forense declaró que, el pequeño fue torturado durante meses pero, pasó sus últimas horas encerrado en una jaula en la cual le echaron agua hirviendo. Murió a causa de traumas en la cabeza y el agua hirviendo.

La madre de la víctima dijo que sólo quería que su hijo “aprendiera una lección de disciplina”, que nunca tuvo intención de matarlo.

Argumenta que, si su objetivo hubiera sido asesinarlo, también habría matado a sus otros hijos, sin embargo, destacó que no tenía el corazón para hacerlo.

El sistema legal de Singapur mantiene una pena de muerte obligatoria por varios delitos, incluido el asesinato.Si se los encuentra culpables, Azlin y Ridzuan podrían ser ejecutados en la horca de la prisión de Changi.

Los padres sostienen la versión de que no asesinaron a su hijo, sin embargo, el juicio continúa.

 

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