La postura de la UNAM ante el caso Salman Rushdie

MÉXICO.- Anel Pérez, directora de Literatura y Fomento a la Lectura (DLFL); en una charla virtual muestra la postura de la UNAM ante el caso de Salman Rushdie, escritor que recibió varias puñaladas hace unos días.

El jueves 18 de agosto, la plática organizada por Anel Pérez, denominada “Caso Rushdie: libertad y censura”, condenó el ataque al escritor.

“La literatura es un espacio de libertad y nunca un campo de batalla”, dijo la directora de Literatura y Fomento a la Lectura.

“Consideramos en la UNAM que este es un espacio de defensa de la libertad a través de los libros y que los escritores son personas de letras y no de armas”.

En la plática sobre Salman Rushdie participaron expertos en el tema, como Aurora Piñeiro, Pedro Ángel Palou y Gastón García Marinozzi. La moderadora fue Julieta García, quien recordó la famosa frase del escritor: “Si alguien trata de callarte… grita”.

Para Aurora Piñeiro, académica de la Facultad de Filosofía y Letras, Rushdie es mucho más que el escritor de Los versos satánicos.

“Rushdie no solo es el escritor de Los versos satánicos sino el creador de 14 novelas, 12 volúmenes ensayísticos; una colección de cuentos y el editor de varias antologías de prosa breve, entre otros títulos, y para mí; Hijos de la medianoche es el top one en la obra del escritor”.

Añadió: “En el hospital donde está Rushdie, ya puede hablar y articular. Sigue apostando por la libertad de pensamiento, por la libertad de expresión y está clarísimo que no se va a dejar intimidar”.

En 2015, Salman Rushdie estuvo en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara y el escritor Pedro Ángel Palou lo presentó y comentó:

“Por un lado, Rushdie es una figura mítica pero es un ser humano que lleva dos años diciendo que agradece que las reseñas ya estén en el área de literatura y no de política”.

El día que atacaron a Rushdie en Nueva York, Palou estaba hablando sobre la libertad de expresión y sobre la importancia de proteger escritores.

También comentó que el atacante nació una década después de la famosa fatwa contra Rushdie.

“Muchos periodistas han declarado que Rushdie bajó la guardia pero yo creo que no. De hecho, no hay ningún autor moderno en la historia de la literatura moderna que haya sufrido este grado de censura y de persecución. Yo lo veo como un acto de coraje, no de bajar la guardia; él decide vivir una vida normal después de tantos años de persecución y de esconderse”.

El escritor dio un dato del PEN Club, que afirma, existen más de 400 autores perseguidos en el mundo pero ninguno ha sufrido como Rushdie.

“La gran enseñanza indirecta, porque Salman Rushdie nunca pensó en enseñar nada, más que contar historias, es que tenemos que proteger la libertad de expresión con todo lo que tenemos, hasta con la vida”.

Gastón García Marinozzi, escritor y periodista, opinó que a partir “de la amenaza a Rushdie se dio un repliegue en la libertad de expresión, en la manera de pensar, de escribir y en la libertad de pensamiento”.

La académica Aurora Piñeiro afirmó que ahora, más que nunca, es el momento de promover la obra de Rushdie.

“Todos los que nos dedicamos a esto tenemos la obligación y responsabilidad de enseñarlo, hablar de su obra, de su escritura y de publicar sobre sus textos. Es la trinchera desde la que nosotros contribuimos y nos ponemos de pie para decirle a Rushdie: ‘por favor, Salman, ponte de pie porque te necesitamos’”.

Los participantes de “Caso Rushdie: libertad y censura” recordaron su buen sentido del humor, la manera en la que se burlaba de sí mismo y del libro que lo “salvó” como escritor, Harún y el mar de las historias, que dedicó a uno de sus hijos.

También criticaron la autocensura que se vive en el mundo y en Estados Unidos, donde sucedió el atentado a Rushdie; opinaron que es un país destruido por los fanatismos y polarizado tras el paso de Donald Trump, entre otros temas.

Finalmente, el escritor Pedro Ángel Palou comentó: “El factor o ecuación Rushdie es: debemos de poder seguir siendo absolutamente libres para decir lo que queramos decir, desde donde lo queramos decir, sabiendo que podemos ofender y asumiendo la responsabilidad”.

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