EU ordena reanudar ‘Permanecer en México’

La Corte Suprema se rehusó a bloquear el fallo judicial que ordena reinstaurar la política que ordena quedarse en México si solicitan asilo.

WASHINGTON.- Rechaza la Corte Suprema el fallo judicial que ordena al gobierno actual a reinstaurar una política del gobierno previo que obliga a quienes solicitan asilo a esperar en México hasta su audiencia.

La corte informó que posiblemente el gobierno violó la ley federal intentando anular el programa Protocolos de Protección al Migrante.

Hasta el momento se desconoce la cifra de personas afectadas; además, el tribunal menor deberá realizar un “esfuerzo de buena fe” para reiniciar el programa.

Sin embargo, el gobierno no tiene impedimento para tratar de darle fin al programa “Permanecer en México”

Cabe recordar que la semana anterior un juez federal de Texas ordenó reinstaurar el programa.

Sin embargo, la Corte Federal de Apelaciones del 5to. Circuito rechazó la solicitud de suspensión.

El magistrado Samuel Alito había ordenado una breve demora para otorgarle al pleno de la corte el tiempo necesario para considerar la apelación del gobierno.

El tribunal del 5to Circuito ordenó una consideración expedita a la apelación del gobierno.

La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU por sus iniciales en inglés) hizo un llamado al gobierno a presentar un argumento más detallado y que pueda resistir el escrutinio de la corte para poner fin al programa “Permanecer en México”.

“El gobierno debe echar mano de todos los recursos disponibles para ponerle fin en su totalidad a este programa ilegal, incluyendo terminarlo nuevamente con una explicación más detallada, señaló Omar Jadwat, director del proyecto por los derechos de los inmigrantes de la ACLU.

“Lo que no debe hacer, es utilizar esta decisión como una cubierta para abandonar su compromiso de restablecer un sistema de asilo justo”, recalcó.

Durante la presidencia de Trump, la medida obligaba a decenas de miles de solicitantes de asilo en Estados Unidos a regresar a México.

Su objetivo era desalentar a los solicitantes de asilo, pero sus detractores señalaron que la política le negaba a la gente su derecho legal a buscar protección en Estados Unidos, obligándolos a esperar en peligrosas ciudades en el lado mexicano de la frontera.