La Casa Verde, el refugio de los grandes en El Mineral

FRESNILLO.- Con una rockola, una barra y un aire de rincón bohemio combinado a la perfección con ese ambiente de cantina típica, recibe La Casa Verde a clientes, visitantes, amigos y turistas. Obras de Daniel Peralta, Mateo Gallegos, Antonio López Monreal, Daniel Sandoval y fotografías de Pedro Valtierra engalanan cada una de las paredes del … Leer más

FRESNILLO.- Con una rockola, una barra y un aire de rincón bohemio combinado a la perfección con ese ambiente de cantina típica, recibe La Casa Verde a clientes, visitantes, amigos y turistas.

Obras de Daniel Peralta, Mateo Gallegos, Antonio López Monreal, Daniel Sandoval y fotografías de Pedro Valtierra engalanan cada una de las paredes del lugar.

Ubicada actualmente en la avenida García Salinas, la historia de La Casa Verde se remonta a 1926 en la avenida Hidalgo en la ciudad de Zacatecas.

Pero fue en 1944, con el auge de la minería, que el abuelo de don Francisco Ibarra, actual administrador del bar, decidió abrir un establecimiento en El Mineral, que con el tiempo se convertiría en un bar museo y lugar icónico de este municipio.

En 1944 el primer hogar de la cantina fue en la García Salinas; luego, se mudaron a Los Arcos; después a un establecimiento frente a los Portales de Lizaola. Pero fue en una vieja casona ubicada entre las calles Obregón y Cadena que se consagró el lugar y duraron alrededor de 40 años; hace tres años se establecieron en el actual local de la avenida García Salinas.

A pesar de las diversas ubicaciones en las que se ha establecido, los clientes son frecuentes y no disminuyen; por el contrario: los propietarios dicen que aumentan gracias a la atención que reciben.

Otro de los grandes secretos que mantiene a los clientes es la botana que elabora la madre de Francisco Ibarra, cuyo sabor auténticamente casero conquista el paladar de los visitantes.  

El célebre compositor mexicano Tomás Méndez Sosa fue un asiduo cliente de esta cantina y aún recuerdan que su bebida favorita era El Manhattan.

Don Francisco Ibarra señala que en ocasiones Méndez Sosa era acompañado por Lola Beltrán y otros grandes amigos suyos, actores de la Época de Oro del cine mexicano. 

La fama del lugar se fue extendiendo y a la fecha se conserva; tan es así que personajes como Pablo Montero, Verónica Castro, Joaquín Cosío y los gobernadores Ricardo Monreal, Amalia García y Miguel Alonso forman la larga lista de visitantes famosos que han acudido a la icónica cantina.

En honor a su más celebre cliente crearon una bebida que lleva su nombre: Tomás Méndez Sosa, creada a base de Fernet, y que es la favorita de los clientes; además, es digestiva y sirve para curar las crudas.

Entre las otras bebidas populares de La Casa Verde también están Las Piedras, Las Sangrías, Los Vampiros, El Conejo y La Ginebra, bebida preparada con nueve licores y de agradable sabor.

Durante muchos años Juan Ibarra fue el bar tender y se convirtió en un personaje muy querido en El Mineral; aunque su muerte dolió mucho a todos sus clientes y amigos, en la cantina aún se conserva esa magia y camaradería que por años fomentó Juanito Casa Verde.

Imagen Zacatecas – Gema Gallegos