Industria y corrupción

Algunas industrias son más susceptibles a la corrupción que otras. Como parte de su análisis sobre el costo de la corrupción, PriceWaterhouseCoopers (PwC), la empresa de consultoría empresarial, fiscal y legal más grande del mundo preguntó a sus clientes -las empresas más representativas en cada área productiva mundial- a través de sus directivos qué sectores … Leer más

Algunas industrias son más susceptibles a la corrupción que otras. Como parte de su análisis sobre el costo de la corrupción, PriceWaterhouseCoopers (PwC), la empresa de consultoría empresarial, fiscal y legal más grande del mundo preguntó a sus clientes -las empresas más representativas en cada área productiva mundial- a través de sus directivos qué sectores eran más susceptibles a la corrupción. Durante 2016 y 2017, esos directores y gerentes calificaron a la minería como la actividad industrial más susceptible a la corrupción, seguida de otras industrias que hacen explotación intensiva de materias primas donde las decisiones políticas y burocráticas son importantes: la construcción y la extracción de petróleo y gas.

Al mismo tiempo, un estudio realizado por economistas de la Universidad de Queensland y la Universidad de Nueva Gales del Sur, en Australia, encontró evidencia de que las industrias que explotan productos básicos y altamente reguladas probablemente sean las más corruptas.

Encuentran que el 80% de los 200 australianos más ricos ganaron fortunas en minería, propiedades y otros sectores donde los favores políticos, incluidos los favores en la distribución de concesiones mineras, pueden ser extremadamente rentables. La minería, la tenencia de la tierra, el petróleo, el gas, y los bancos que financian estas actividades son un gran negocio en Australia -y en México-.

No resultaría sorprendente que la investigación australiana también diera respuestas a conductas similares en el contexto internacional considerando que estas industrias tienen manuales de procedimientos, mercados, políticas y patrones de conducta mundiales.

En México, curiosamente, aunque hay convocatorias públicas para propiciar organismos y una nueva política nacional anticorrupción, una voz está ausente. Las empresas mexicanas serían uno de los principales beneficiarios de un combate amplio contra la corrupción en México, sin embargo, no se escucha en el debate a las industrias mineras y de la construcción.

La corrupción aumenta los costos de toda actividad productiva. El Foro Económico Mundial estima que la corrupción agrega una tasa promedio del 10% al coste de hacer negocios, ya que la corrupción puede implicar desde transacciones adicionales hasta sobornos. Se estima que el costo económico total de la corrupción en todo el mundo es equivalente al 5% del PIB mundial.

Cuando existe corrupción, la asignación de capitales se distorsiona. A menudo, la corrupción coloca a los contratistas mejor conectados y aquellos que son más propensos a otorgar sobornos por encima de los que ofrecen el mejor producto. Y la corrupción lleva a los gobiernos a dar ventaja a proyectos que ofrecen beneficios personales por encima de aquellos que tienen el máximo beneficio público.

La corrupción también puede limitar la competencia en cualquier mercado (también en un mercado estatal). Usar conexiones gubernamentales y políticas corruptas para detener la entrada de nuevos participantes en un mercado empresarial puede ayudar a crear o consolidar monopolios y oligopolios.

Es menos probable que las empresas inviertan en países que tienen altos niveles de corrupción percibida. Existe una fuerte evidencia empírica que demuestra que la corrupción tiene un impacto adverso en la relación inversión/PIB.

Si bien se está haciendo mucho hincapié en la necesidad de atraer capital extranjero a Zacatecas a través de un programa de visitas a los posibles países candidatos que se presenta en contradicción con una política fiscal estatal restrictiva, no se habla de cómo incide este factor en la imagen del estado.

Hablando de México, las percepciones de Transparencia Internacional sobre corrupción han empeorado desde 2012. Para 2017, nuestra clasificación entre los países había caído al puesto 135. PwC ha calculado que, a nivel mundial, una reducción de un punto en este puntaje del índice se asocia con una disminución de $ 486 en el PIB per cápita. Hablando de Zacatecas, eso también es mucho dinero.

*El autor es integrante del Comité de Participación Ciudadana del Sistema Anticorrupción de Zacatecas.

*Twitter: @ASachG

Imagen Zacatecas – Antonio Sánchez González




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