Logo Al Dialogo
Estado

Sombrerete, un legado de historia y arquitectura

SOMBRERETE.-  El Real  de Minas de Sombrerete fue una visión de Juan de Tolosa que llegó a producir más plata que Zacatecas. Al oeste del estado, de la apuesta casi a ciegas de Juan de Tolosa y el cincel de Bernardo del Carpio se fundó Real de Minas de Sombrerete; hoy quedan las sombras arquitectónicas … Leer más

Redacción Zacatecas
|
26 de noviembre 2017

SOMBRERETE.-  El Real  de Minas de Sombrerete fue una visión de Juan de Tolosa que llegó a producir más plata que Zacatecas.

Al oeste del estado, de la apuesta casi a ciegas de Juan de Tolosa y el cincel de Bernardo del Carpio se fundó Real de Minas de Sombrerete; hoy quedan las sombras arquitectónicas de una villa que llegó a producir más plata que Zacatecas.  

Con una tierra fértil en oro y plata, el actual municipio de Sombrerete fue fundamental en el desarrollo minero del país, donde en poco tiempo surgió el esplendor arquitectónico que dio el rostro colonial y el nombramiento de Pueblo Mágico.

Por la historia y el significado para sus habitantes, su arquitectura se puede ejemplificar en cinco pilares: la iglesia de San Francisco, el templo de San Juan Bautista, la capilla de Santa Veracruz, el palacio del Marqués del Apartadero y la iglesia de La Candelaria.

Con apenas una piedra brillante en sus manos, el 6 de junio de 1555 Juan de Tolosa empeñó todas sus propiedades para poder financiar las campañas de exploración en la región, con las que encontraría la Mina de la Cañada.

Los documentos reguardados en el Archivo Histórico de Sombrerete relatan como desde el periodo novohispano hasta la Revolución mexicana, personajes ilustres de México paseaban por las principales calles del municipio, debido a su importancia económica.

Si se sigue la misma ruta de los primeros mineros en el Camino Real Tierra Adentro, del sur al norte, se encuentra el exhospital de los Agustinos que data de 1576, donde el escudo de la orden aún recibe a los visitantes.

Algunas veces como cuartel general de la intervención francesa en 1861, escuela primaria y otras en total abandono, la historia de la ahora Casa Municipal de Cultura es fundamental para Sombrerete.

Por la calle de Bracho siguiendo la ruta de piedras azules se llega a al Templo de San Juan Bautista, donde dos gárgolas en forma de jaguar y un águila resguardan la imagen de Nuestra Señora de la Concepción.

La fachada del templo resultó de la visión del artista Bernardo del Carpio y la confluencia de tres culturas: árabe, española e indígena tlaxcalteca.

De forma paralela, los pilares neoclásicos resguardan las ornamentas de un barroco tardío, las parras y ángeles que conviven con el sol y la luna de los indígenas; la cúpula más antigua del templo tiene arcos característicos de la arquitectura árabe.  

Sobre la avenida Hidalgo, en el extinto Hotel Bonanza, la Casa del Salero y otras fincas, aún es posible encontrar los últimos rastros de la vida de personajes como Joaquín Amaro Domínguez, Luis Moya Regis, José María Bracho, Miguel Auza Arrenechea, entre otros.

Los impactos de las balas de la Revolución se conservan en las fachadas de la avenida principal, donde en una de las fincas se reunieron Venustiano Carranza Garza y Pánfilo Natera para planear la Toma de Zacatecas el 23 de junio de 1914.

Casi al final de avenida sobresale el palacio de Francisco de Fagoago, quien fue conocido como el Marqués del Apartadero y miembro de una de las familias más acaudaladas de México.

El singular rostro barroco con dos hidalgos en la entrada refleja la riqueza de la familia, quien construyó una réplica del Palacio de Apartado, que les fue expropiado por la Corona del Virrey en la Ciudad de México.

Al desviarse rumbo al Jardín Zaragoza, olvidado por el crecimiento urbano se encuentra el puente  de Santo Domingo que data antes de 1688, fecha de su primer mantenimiento, y escuda los calabozos que se presumen utilizó la Santa Inquisición.

Entre la maleza  subterránea es posible observar su diseño europeo  y una placa de cantera que registra el día de la inauguración de los cárcamos el 7 de julio de 1988.

Según registros del Archivo Histórico, Sombrerete obtuvo su auge minero en 1775, donde producía más plata que en Zacatecas con mineras como Vetanegra, que obtenía hasta 70 kilogramos por cada tonelada de tierra extraída.

 Ante este panorama, el juez el tribunal José Mariano de Fagoaga, sobrino del Marqués de Apartado, solicitó la independencia legal de Sombrerete de Zacatecas y aumentar su jurisdicción regiones de Durango.

Antes de su muerte en 1778, Fernando de la Campa y Cos destinó 30 mil pesos para la construcción del templo de Santo Domingo, donde se resguarda cuadros, altares de madera e iconos del arte sacro en México.

En la fachada de la iglesia se grabaron el rostro de los familiares muertos de la familia De Campa y Cos, que conviven con las ornamentas barrocas con rasgos indígenas  y los cuatros papas agustinos.

En 1680 la población en Sombrerete era de 4 mil habitantes, donde 2 mil eran españoles y el resto indígenas; la  división entre sectores era muy estricta y los indígenas no podían entrar a las principales iglesia.

Ante esta situación social surgió la capilla de los tlaxcaltecas de La Candelaria y, aunque estaba hecha de barro y piedra y era menor a las otras iglesias,  ahí se realizaba la mayor  concentración religiosa del municipio.

Los indígenas decoraron las paredes con pinturas rupestres, donde sobresalían las figaras de barcos, olas y cruces como una forma de narrar de dónde llegaron los españoles; 431 años después, la celebración aún se realiza.

A medio kilómetro de la iglesia de La Candelaria, se construyó el templo de la Cofradía de la  Santa Veracruz en 1567, donde se muestran los primeros indicios del primer neoclásico  de México.  

En el centro del municipio, se encuentra la iglesia de San Francisco que sirvió como cuartel de la intervención de francesa, donde se descubrieron  diversos cárcamos que conectaron a los principales puntos del municipio.

La fachada del templo es una narración sobre la evangelización de los indígenas,  a través de una iconografía donde destacan elementos del barroco tardío mezclados con el neoclásico.

Oscar Iban Nava, titular del Archivo Histórico del Municipio de Sombrerete, dijo que solo se conserva el 40% del esplendor arquitectónico del auge del municipio, debido a que desaparecieron algunos momentos.

Según los registros, añadió,  en la entrada al municipio había cerca de 46 tornaderos de minerales, la iglesia de los Santos niños y Cristo Señor de la Caridad desaparecieron, así como las diversas haciendas. 

Imagen Zacatecas – Noé Marín

reproductor
Tik tak zac S.A. de C.V.- De no existir previa autorización por escrito, queda expresamente prohibida la publicación, retransmisión, edición y cualquier otro uso de los contenidos de este portal.