Caldo de rata

Hace ya algún tiempo el canal National Geographic dedicó uno de sus episodios del programa Tabú Latinoamérica a la ciudad de Fresnillo por un peculiar alimento característico de mi ciudad natal, el caldo de rata. 

Investigando al respecto, me enteré que este platillo es de consumo común en nuestras tierras desde antes de la llegada de los españoles y por si esto fuera poco, se le atribuyen propiedades curativas maravillosas que ningún otro alimento le puede ofrecer. 

Casi le puedo asegurar que en este momento estará imaginándose a los desagradables roedores de ciudad y no habrá poder humano que le haga degustar un caldo de este tipo. De hecho, según los expertos, las ratas de ciudad tienen características diferentes y son portadoras de muchas enfermedades por lo que su consumo no es recomendado para los humanos.

La rata de campo o magueyera se caza en la campiña estatal o comunidades rurales con trampas, por lo que los expertos que se dedican a esto dicen que se deben poner estas con carnadas como manzana o tortilla para que entren a las mismas.

Los cazadores son de tradición y defienden su modo de vida comentando que este animal es herbívoro y muy limpio, ya que solo come semillas y plantas que se encuentran en el hábitat en el que se desenvuelven. 

Sus hábitos son nocturnos y se cree que parte de sus atribuciones curativas provienen de uno de sus alimentos, la raíz de nopal. Usted puede encontrar ratas de campo en los tianguis dominicales de Fresnillo y los precios rondan entre los 60 y 90 pesos según el tamaño del animal. 

Comentan las personas que comercializan estos animales que para su venta las deben traer con pelo, ya que el pelaje de la garganta de una rata de este tipo es totalmente diferente a las de ciudad y así a los clientes les da confianza, esto se hace así para que los compradores observen el pelaje de la rata de campo que siempre será blanco. Comentan los vendedores que eso es la mejor garantía del producto. 

El proceso de elaboración de este platillo no es muy complicado y la materia prima necesaria es de lo mejor para nuestro cuerpo. Aparte de las ratas, que deberá previamente a su cocción salpimentar y medio adobar, las verduras como la calabaza, zanahoria, elote, chayote, col y chile condimentarán la receta perfecta. 

La preparación es como la de cualquier caldo y estará lista para su consumo en aproximadamente dos y media horas. 

Si quiere vivir la experiencia de este suculento platillo, le comento que se sirve generalmente en las cantinas los domingos previo a la hora de comida y gracias a la televisora que lo hizo famoso ahora es conocido como comida tabú. Los principales consumidores según los cantineros son adultos jóvenes, trabajadores mineros, personas del campo que visitan la ciudad por comercio o gente que tuvo excesos la noche anterior, para ellos este caldo es llamado “levanta muertos”. 

Comentando con una amiga que conoce las bondades de este caldo, me dice que para las mujeres que tuvieron una cesárea se recomienda el consumo de tres días seguidos para que al cuarto se levanten sin problema. 

Para los anémicos se recomienda, aparte de lo antes mencionado, se agreguen garbanzos y asegura ella por experiencia, que un caldo de rata contiene más de las proteínas que el cuerpo requiere en un día. 

Para los que tienen resaca, se sugiere condimenten el caldo con chile chipotle o pasilla, remedio que de seguro les compondrá sus males en segundos. 

De la misma forma dicen  los que saben que la persona que come el caldo y suda es porque no está bien nutrido; el consumirlo con frecuencia evitará a futuro cualquier sudoración al momento de la ingesta. 

Si quiere conocer y aventurarse a probar las bondades de este platillo permítame invitarlo este domingo al Rata Fest 2018 donde participarán 15 establecimientos que estarán preparando este nutritivo manjar. 

Habrá también en el lugar cantinas con bebidas espirituosas y tres lugares de comida variada por si la experiencia no es de su agrado. 

Amenizando este evento estarán Los Románticos de Zacatecas y cuatro grupos más que harán de la tarde una experiencia muy buena. La cita se dará en el jardín Madero de Fresnillo a donde le recomiendo se vaya temprano, lleve a su familia y disfrute de una tarde sin igual. Se espera atender a 2 mil 500 comensales que estarán in situ a lo largo del evento. 

En lo particular considero que este tipo de festivales, aparte de promover nuestras tradiciones, fomentan la cultura turística local y nos hace más conscientes del trato a nuestros visitantes. Felicito por este logro a la organización, a la Canirac que siempre apoya estos eventos y en lo particular al gobierno municipal por creer en el turismo, les deseo el mejor de los éxitos y que se convierta este festival en una tradición de año con año. 

Finalmente sugerirle se anime a probar el caldo de rata, deshágase de prejuicios y piense lo siguiente: Si en algunos lugares del mundo se comen insectos, escorpiones y otros animales de aspecto más desagradable ¿porque rata no?.

Hasta la próxima. 

Imagen Zacatecas – Raúl Muñoz del Cojo