El Sol procreó 2 hijos con Aracely Arámbula. | Foto: cortesía.
La gente va a las cuevas para explorar y salir de aventura.
GUADALUPE.- Si quiere salir de aventura, explorar unas cuevas y tener una buena vista para sacar fotos, hay un lugar escondido en Zacatecas.
Solo es cuestión de ir a la laguna de la Zacatecana, que está a espaldas de la capilla Martínez Domínguez, donde dicen puede ir a acampar o buscar brujas.
Aquí parecerá que se escapa de la ciudad para llegar a un lugar que no ha tocado la civilización.
Esto, sobre todo, por las cuevas que están por ahí, hasta hay una que parece una nariz y a la que seguro, si tiene ganas y es atrevido, va a tener ganas de meterse ver qué se encuentra.
Según los pobladores, sobre todo los más viejitos que sí le saben a la historia local, van a decirle que en estos lugares llegaron a resguardarse nuestros antepasados lejanos, por ahí esos tiempos eran nómadas.
Y es que por mucho tiempo, la gente era nómada y se metían a cuevas para tener un techito donde cuidarse del aire, la lluvia, de las fieras o hasta de otra gente.
Pero si uno busca documentos que avalen estas ideas, la verdad es que no hay, y todo esto queda nada más como una teoría de pueblo local de Martínez Domínguez.
Si usted gusta darse una vuelta y comprobar si estas cuevas son un buen lugar para pasar la noche o nomás estar ahí un rato, usted puede llegar a ellas si sigue el camino a la capilla del cerro y ahí debe seguir adelante.
Debe pasar entre los barbechos y desviaciones y algunos basureros, y finalmente podrá llegar hasta este lugar en donde no encontrará ruido, contaminación ni nada.
Si se le antoja visitar este lugar, va a poder conectarse con la naturaleza y va a tener un buen rato de calma.
Si tiene tiempo en la temporada de lluvia, aquí se hacen unos pozos y a la vista se pone todavía más bella, con todos los arroyos y lagunas que se llenan a los alrededores.